Tratamiento del dengue (clásico y hemorrágico)

Dengue

El tratamiento del dengue puede implicar medidas como evitar el esfuerzo y beber abundante líquido, el uso de suero de rehidratación oral, medicamentos antipiréticos o analgésicos y, en los casos más graves, inyección de suero directamente en la vena y transfusiones de sangre.

El dengue es una enfermedad causada por un virus que se transmite a través de la picadura del mosquito Aedes aegypti y puede provocar síntomas como fiebre, dolor corporal y vómitos, y, en casos más graves, también puede haber sangrado, se conoce a este tipo de dengue. como el dengue hemorrágico. Conozca los principales síntomas del dengue.

Por lo tanto, el tratamiento del dengue clásico o hemorrágico debe realizarse siempre con orientación médica, de acuerdo con la recomendación del Ministerio de Salud, para evitar complicaciones, como deshidratación severa, problemas hepáticos y cardíacos.

Tratamiento clásico del dengue

El tratamiento clásico del dengue puede implicar:

  • Evite el esfuerzo excesivodescansar siempre que sea posible;
  • Beber mucho líquidopara evitar la deshidratación;
  • Utiliza suero de rehidratación oralespecialmente en caso de vómitos o diarrea;
  • Utiliza analgésicos y antipiréticos.como paracetamol o dipirona, en caso de dolor o fiebre, según las indicaciones del médico;
  • Medicamentos antieméticoscomo metoclopramida o bromoprida, en caso de náuseas o vómitos;
  • Medicamentos antihistamínicoscomo la dexclorfeniramina o la loratadina, que pueden estar indicadas en caso de picor intenso en el cuerpo.

Además, generalmente se recomienda regresar al servicio de salud 72 horas después de iniciado el tratamiento o antes si aparecen síntomas como dolor abdominal intenso y sangrado o en caso de vómitos persistentes a pesar del uso de medicación. Ver más remedios recomendados para el dengue.

Tratamiento del dengue hemorrágico

El tratamiento del dengue hemorrágico generalmente se lleva a cabo en el hospital, y puede implicar el uso de suero directamente en la vena y los mismos medicamentos que están indicados en el dengue clásico para aliviar el dolor y la fiebre, como el paracetamol o la dipirona.

En los casos en que una persona pierde mucha sangre, también puede estar indicada una transfusión de sangre para reponer el volumen perdido en el organismo o las plaquetas, si son muy bajas.

Además, en casos más graves, especialmente cuando la persona presenta somnolencia, presión arterial baja y extremidades frías o cuando no responde bien al tratamiento inicial, puede estar indicado el ingreso en la UCI.

Tratamiento complementario

Se puede recomendar el uso de tés, como el té de manzanilla, la hierba de San Juan o el rábano picante, para complementar el tratamiento indicado por el médico, ya que ayudan a reducir los síntomas y fortalecer la inmunidad. Ver más remedios caseros para el dengue.

También se recomienda mantener una dieta adecuada, prefiriendo alimentos ligeros y de fácil digestión, además de evitar el consumo de refrescos, bebidas alcohólicas y dulces, ya que pueden empeorar síntomas, como náuseas o vómitos. Sepa qué comer para recuperarse del dengue.

Posibles complicaciones

La principal complicación del dengue es el desarrollo de fiebre hemorrágica por dengue. Sin embargo, el dengue también puede perjudicar el funcionamiento del hígado o del corazón, provocando convulsiones y encefalitis, por ejemplo, en algunas personas. Infórmate de todas las complicaciones y consecuencias que puede provocar el dengue.

Signos de mejora y empeoramiento.

Los signos de mejoría en el dengue son disminución de la fiebre y alivio del dolor corporal y suelen aparecer hasta 8 días después del inicio de los síntomas. Compruebe cuánto dura el dengue.

Los signos de empeoramiento del dengue incluyen vómitos frecuentes, dolor intenso en el abdomen, presión arterial baja, somnolencia, palpitaciones, manos y pies fríos, manchas rojas en la piel y sangrado, por ejemplo.

Cuando ir al hospital

El tratamiento del dengue debe realizarse en el hospital en caso de:

  • Personas mayores de 65 años;
  • Niños menores de 2 años;
  • Mujeres embarazadas;
  • Personas con enfermedades como hipertensión arterial, insuficiencia cardíaca o renal y diabetes.

En estos casos, el dengue puede ser más grave, pudiendo recomendarse la hospitalización para vigilar la recuperación de la persona y prevenir la aparición de complicaciones que puedan poner en riesgo la vida.