qué es, síntomas, causas y tratamiento

Salud de los hombres

El síndrome de Couvade corresponde a un conjunto de síntomas que pueden aparecer en los hombres durante el embarazo de su pareja, los cuales expresan psicológicamente el embarazo presentando sensaciones similares. Así, los hombres pueden ganar peso, sufrir náuseas, antojos, ataques de llanto o incluso depresión.

Los síntomas también demuestran la necesidad que tienen muchos hombres de ser padres, o el fuerte vínculo afectivo y emocional con su esposa, que acaba transfiriendo al marido una serie de sensaciones que normalmente sólo se manifiestan en la mujer.

Síntomas del síndrome de Couvade

Los hombres pueden experimentar síntomas físicos y psicológicos del embarazo, siendo los principales:

  • Náuseas;
  • Asia;
  • Dor abdominal;
  • Hinchazón;
  • Aumento o disminución del apetito;
  • Cambios respiratorios;
  • Dolor de espalda;
  • Calambres en las piernas;
  • Cambios en el sueño;
  • Ansiedad;
  • Inquietud;
  • Depresión;
  • Cambio en el apetito sexual.

El síndrome de Couvade no suele provocar trastornos psicológicos, sin embargo, es recomendable acudir a un especialista sólo cuando la situación se sale de control y empieza a molestar a la pareja y a sus allegados.

Posibles Causas

Aún no se sabe exactamente qué causa este síndrome, pero se piensa que puede estar relacionado con la ansiedad del hombre por el embarazo y la paternidad, o que se trata de una adaptación inconsciente del cerebro para que el futuro padre pueda relacionarse y apegarse al bebé.

Este síndrome es más común en hombres que tienen un fuerte deseo de ser padres, que están muy apegados emocionalmente a su pareja embarazada, y si el embarazo es de riesgo, tienen aún más probabilidades de experimentar estos síntomas.

Cómo se realiza el tratamiento.

Al no considerarse una enfermedad, el síndrome de couvade no tiene un tratamiento específico, y los síntomas pueden persistir en los hombres hasta el nacimiento del bebé. En estos casos, se aconseja que el hombre intente relajarse, lo que puede ayudar a aliviar los síntomas.

Si los síntomas son muy intensos y frecuentes, o si se salen de control y empiezan a molestar a la pareja y a sus allegados, es recomendable consultar a un terapeuta.