La hepatitis crónica es una inflamación del hígado que dura más de seis meses y, en la mayoría de los casos, es causada por el virus de la hepatitis B. Sin embargo, la hepatitis crónica también puede ser causada por los virus de la hepatitis C y D, un consumo excesivo de alcohol o ser consecuencia de enfermedades autoinmunes, por ejemplo.
Aunque en la mayoría de los casos la hepatitis crónica no causa ningún síntoma evidente, y suele identificarse durante exámenes de rutina, algunas personas pueden presentar algunos síntomas, como malestar general, disminución del apetito o cansancio frecuente sin motivo aparente.
Aún así, aunque no provoque síntomas, la hepatitis siempre debe tratarse, ya que si continúa empeorando puede provocar complicaciones más graves, como cirrosis o insuficiencia hepática. Por ello, siempre que se sospeche de un problema hepático, es recomendable consultar a un hepatólogo para valorar la presencia de algún problema e iniciar el tratamiento más adecuado.
![](https://static.tuasaude.com/media/article/od/tl/hepatite-cronica_35581_l.webp)
Síntomas principales
Los síntomas de la hepatitis crónica son progresivos, apareciendo a medida que se produce inflamación del hígado, siendo los principales:
- Náuseas;
- Vómitos;
- Vientre hinchado;
- Enrojecimiento en las manos;
- Piel y ojos amarillos;
- Sensación constante de malestar general;
- Disminucion del apetito;
- Cansancio frecuente sin motivo;
- Fiebre baja constante;
- Malestar en la parte superior derecha del vientre.
Como los síntomas de la hepatitis surgen a medida que se produce la inflamación, es más común que la hepatitis crónica se identifique sólo durante los análisis de sangre de rutina, notándose cambios en los niveles de TGP y TGO, gamma-GT (GGT), fosfatasa alcalina y bilirrubina.
Cómo confirmar el diagnóstico.
Si el médico sospecha de hepatitis crónica, además de nuevos análisis de sangre más específicos para enzimas hepáticas y anticuerpos, también puede solicitar pruebas de imagen, como ecografía o tomografía computarizada.
También hay situaciones en las que se puede solicitar una biopsia, en la que se envía una pequeña muestra de tejido hepático al laboratorio para intentar confirmar la causa de la hepatitis o intentar comprender el nivel de daño del hígado, ayudando a mejorar adaptar el tratamiento.
Posibles causas de la hepatitis crónica.
En la mayoría de los casos, la hepatitis crónica es causada por una infección por el virus de la hepatitis B; sin embargo, otras causas relativamente comunes incluyen:
- virus de la hepatitis C;
- virus de la hepatitis D;
- Consumo excesivo de alcohol;
- Enfermedades autoinmunes.
Aunque es más raro, la hepatitis crónica también puede ser causada por el uso de algunos tipos de medicamentos, especialmente Isoniazida, Metildopa o Fenitoína. Cuando esto sucede, suele ser suficiente con cambiar la medicación para que la inflamación del hígado mejore.
Cómo se realiza el tratamiento.
El tratamiento de la hepatitis crónica depende de la gravedad del daño hepático y sus causas. Sin embargo, es relativamente común que el tratamiento comience con el uso de algún tipo de corticosteroides para reducir la inflamación y mejorar los síntomas, hasta conocer la causa específica.
Una vez identificada la causa, el tratamiento debe ser el adecuado para curar la enfermedad, siempre que sea posible, y evitar que surjan complicaciones. Así, en el caso de la hepatitis causada por los virus de la hepatitis B o C, el médico puede recomendar el uso de algunos medicamentos antivirales. Si la hepatitis es causada por una enfermedad autoinmune, es importante iniciar el tratamiento para esa enfermedad, y si es causada por el exceso de alcohol o el uso de medicamentos, se debe suspender su uso.
Al mismo tiempo, también puede ser necesario tratar algunas complicaciones que surgen con el aumento de la inflamación, como la encefalopatía o la acumulación de líquido en el abdomen.
En casos más graves, donde el daño hepático está muy avanzado, suele ser necesario realizar un trasplante de hígado. Comprender cómo se realiza el trasplante y la recuperación.