qué es, para qué sirve y cómo se hace

Artritis

TENS es un método de fisioterapia que utiliza impulsos eléctricos para ejercer una acción analgésica sobre el sistema nervioso, ayudando a tratar dolores crónicos y/o agudos, como lumbalgia, ciática o tendinitis, por ejemplo.

Este tipo de tratamiento, también conocido como “neuroestimulación eléctrica transcutánea”, funciona estimulando los nervios sensoriales, permitiendo la activación de mecanismos naturales de control del dolor y la liberación de opioides endógenos, como la encefalina, que tiene un efecto similar a los medicamentos opioides.

El TENS debe ser realizado por un fisioterapeuta especializado, utilizando diferentes intensidades de impulsos eléctricos, según la patología a tratar.

Para qué sirve

La técnica TENS se utiliza principalmente para aliviar dolores agudos y crónicos, como:

  • Artritis;
  • Dolor en la región lumbar y/o del cuello;
  • Dolor de ciática;
  • tendinitis;
  • Bursitis;
  • Dislocación;
  • Esguince;
  • epicondilitis;
  • Reumatismo;
  • fibromialgia;
  • Dolor de cuello;
  • Dolor de rodilla;
  • Dolor de huesos;
  • Neuropatía diabética;
  • Dolor pélvico causado por endometriosis;
  • Dolor después de la cirugía;
  • Dolor causado por lesiones deportivas;
  • Dolor causado por el cáncer.

Por tanto, al realizar TENS para estas situaciones, se consigue favorecer la estimulación muscular y la vasodilatación, lo que favorece la reducción del dolor, la hinchazón y la curación de las lesiones de tejidos blandos.

¿Es útil el TENS para aliviar el dolor del parto?

TENS se puede utilizar para aliviar el dolor del parto, especialmente el dolor lumbar, y normalmente está indicado cuando otras formas de alivio del dolor no han sido efectivas, como el ejercicio, el masaje o las técnicas de respiración y relajación. Vea las principales formas de aliviar el dolor del parto.

De esta forma, el TENS puede ser realizado por el fisioterapeuta en cualquier etapa del parto, especialmente al inicio del parto, y se considera un método seguro si se aplica correctamente y sin provocar cambios en el bebé.

¡Cuidar tu salud nunca ha sido tan fácil!

Como esta hecho

El TENS se realiza aplicando electrodos sobre la piel, conectados a un dispositivo que envía impulsos eléctricos, que activan mecanismos de control internos del sistema nervioso, ejerciendo una acción analgésica. Este es un método no invasivo, que no genera adicción, no tiene riesgos para la salud y en la mayoría de los casos no causa efectos secundarios.

Su mecanismo fisiológico de analgesia depende de la modulación de la corriente aplicada a la región afectada, es decir, si se aplican impulsos eléctricos de baja frecuencia y alta intensidad, el cerebro o la médula espinal liberan endorfinas, que son sustancias con efectos similares. a la morfina, lo que conduce al alivio del dolor.

Si se aplican impulsos eléctricos con alta frecuencia y baja intensidad, se produce analgesia debido a un bloqueo de las señales nerviosas de dolor que no se envían al cerebro.

La aplicación de TENS dura alrededor de 20 a 40 minutos, dependiendo de la intensidad del estímulo y puede realizarse en el consultorio de un fisioterapeuta o en casa.

Cuando no está indicado

Al ser un método de tratamiento que implica la aplicación de corriente eléctrica, la realización de TENS no se recomienda a mujeres en período de lactancia ni a personas que tengan marcapasos, arritmia cardíaca, trombosis venosa profunda o trastornos epilépticos.

Además, la aplicación no debe realizarse a lo largo del trayecto de la arteria carótida ni en zonas de la piel que presenten cambios debido a la enfermedad o cambios de sensibilidad.

Durante el embarazo, la TENS no debe usarse al principio del embarazo, en mujeres con antecedentes de epilepsia, irritación uterina, antecedentes de aborto espontáneo o si hay complicaciones en el embarazo actual. Además, la TENS no se debe realizar en el abdomen, la zona pélvica, las manos, los pies, las piernas, las rodillas, los hombros, las mejillas o el cuello.