9 remedios caseros para el asma (y cómo hacerlos)

Asma

Algunos remedios caseros como el té de jengibre y ajo o el té verde pueden ayudar a mejorar los síntomas del asma, como la tos, la sensación de presión en el pecho, las sibilancias al respirar o el malestar, ya que son ricos en sustancias antiinflamatorias. , antialérgicos e inmunoestimulantes que reducen la inflamación de los bronquios y mejoran el flujo de aire a los pulmones.

El asma es una inflamación crónica de los pulmones en la que la persona presenta dificultad para respirar, falta de aire o sensación de opresión en el pecho, siendo más común en personas que tienen antecedentes familiares de asma o que tienen muchas alergias. Sepa identificar los síntomas del asma.

Aunque no pueden sustituir el tratamiento médico, los remedios caseros son una buena opción para ayudar a prevenir o controlar los ataques de asma y pueden utilizarse para complementar el tratamiento recomendado por tu médico.

Los mejores remedios caseros para el asma

Algunos remedios caseros para el asma son:

1. Té verde

Algunos estudios muestran que el té verde, elaborado a partir de la planta Camellia sinensisTiene cafeína en su composición, sustancia que ayuda a relajar los músculos de los bronquios, reduciendo las crisis de asma, mejorando la respiración.

Además, los compuestos fenólicos presentes en el té verde, como la epigalocatequina, que tiene propiedades antioxidantes, ayudan a reducir el estrés oxidativo provocado por los radicales libres en las células y la inflamación de las vías respiratorias, ayudando a aliviar los síntomas del asma.

El té verde se puede utilizar en forma de tés, infusiones o extractos naturales, y debe utilizarse con consejo médico ya que un uso excesivo puede dañar el hígado.

Ingredientes

  • 1 cucharadita de hojas de té verde o 1 bolsita de té verde;
  • 1 taza de agua hirviendo.

Modo de preparación

Agrega las hojas o la bolsita de té verde a la taza de agua hirviendo y déjala reposar durante 10 minutos. Colar o retirar el sobre y beber inmediatamente. Este té se puede consumir de 3 a 4 veces al día, o según las indicaciones de tu médico.

El té verde no debe ser consumido por niños, mujeres embarazadas o en período de lactancia, personas que padezcan insomnio, hipertiroidismo, gastritis o hipertensión arterial. Además, al contener cafeína en su composición, debes evitar beber este té al final del día o en cantidades superiores a las recomendadas.

2. Té de jengibre y ajo

El té de jengibre y ajo tiene propiedades antioxidantes y antiinflamatorias debido a la alicina, presente en el ajo, y a compuestos fenólicos, como el gingerol, chogaol y zingerone, presentes en el jengibre. Estas sustancias ayudan a combatir los síntomas del asma como tos, sibilancias, sensación de presión en el pecho y malestar general.

Ingredientes

  • 3 dientes de ajo, pelados y cortados por la mitad;
  • 1 cm de raíz de jengibre o ½ cucharadita de jengibre en polvo;
  • 3 tazas de agua;
  • Miel para endulzar (opcional).

Modo de preparación

Hervir agua con ajo. Retirar del fuego y agregar jengibre y miel. Colar y servir después.

El jengibre no debe ser consumido por personas que toman anticoagulantes, por lo que debe eliminarse del té en estos casos.

Además, no se recomienda utilizar estos aceites en casos de ataques agudos de asma. En estos casos se debe buscar atención médica lo antes posible.

3. Infusión de tomillo

La infusión de tomillo es rica en sustancias antiinflamatorias, antioxidantes y expectorantes, como timol, carvacrol, cimeno y linalool, que permiten la eliminación de las flemas y alivian la tos y la sensación de pesadez en el pecho provocada por la rinitis alérgica.

Ingredientes

  • 1 cucharada de extracto de tomillo seco o 2 ramitas de tomillo fresco;
  • 1 litro de agua hirviendo.

Modo de preparación

Agrega el tomillo seco al agua hirviendo y déjalo reposar de 5 a 10 minutos. Colar y beber hasta 3 tazas por día.

La infusión de tomillo no debe ser utilizada por personas con problemas estomacales como gastritis o úlceras, por personas con enfermedades hepáticas o que utilicen medicamentos anticoagulantes como warfarina o clopidogrel, por ejemplo.

4. Té de retama dulce

Té de retama, preparado con la planta medicinal de la especie. Scoparia dulcisEs un gran remedio natural para el asma, ya que posee en su composición taninos, alcaloides, esteroides y compuestos fenólicos, con acción antiinflamatoria y antialérgica, ayudando a aliviar la tos.

Ingredientes

  • 5 g de retama dulce;
  • 250 mililitros de agua.

Modo de preparación

Agrega la retama al agua y deja hervir durante 10 minutos. Luego, déjalo enfriar, cuela y bebe hasta 3 tazas al día.

Este té no debe ser tomado por mujeres embarazadas o en período de lactancia ni por personas que tengan hipertensión arterial o diabetes, o que utilicen medicamentos inhibidores de la bomba de protones, como omeprazol o lansoprazol, por ejemplo.

5. Sirope de rábano picante

Jarabe de rábano picante, elaborado con la raíz de la planta medicinal de la especie. Armadura rusticaEs rico en isotiocianatos, que son sustancias con acción antiinflamatoria, que ayudan a reducir la inflamación de las vías respiratorias, aliviando los síntomas de tos y sensación de presión en el pecho, por ejemplo.

Ingredientes

  • 1 cucharadita de raíz de rábano picante rallada;
  • 1 cucharadita de miel.

Modo de preparación

Mezclar los ingredientes en un recipiente limpio y seco y dejar reposar 12 horas. Luego cuela la mezcla por un colador fino y toma esta dosis 2 o 3 veces al día.

Este jarabe no debe ser utilizado por niños menores de 5 años, mujeres embarazadas o en período de lactancia, ni por personas con problemas estomacales como gastritis o úlceras, o que padezcan síndrome de intestino irritable, hipotiroidismo o hipertiroidismo.

Además, el uso excesivo de rábano picante puede provocar irritación en la boca, la nariz o el estómago.

6. Té de miel amarilla

Té uxi amarillo, preparado con la corteza de la planta de la especie. endopleura uchiTambién es un buen remedio natural para el asma, ya que contiene sustancias antiinflamatorias como la bergenina y el ácido maslínico, además de esteroides naturales, como el sitosterol y el estigmasterol, con acción antiinflamatoria e inmunoestimulante, ayudando a combatir los síntomas del asma.

Ingredientes

  • 5 g de corteza de uxi amarilla;
  • 500 mililitros de agua.

Modo de preparación

Agrega el uxi amarillo y el agua a una cacerola y deja hervir por unos 5 minutos. Déjalo reposar 10 minutos, cuela y bebe hasta 3 tazas de té al día.

Este té no está recomendado para mujeres en periodo de lactancia o embarazadas, ya que puede interferir en el proceso de formación fetal.

7. Aceite esencial de lavanda

El aceite esencial de lavanda tiene acción antiinflamatoria que ayuda a reducir la inflamación de las vías respiratorias, especialmente causada por alergias, siendo muy útil para ayudar a calmar y desbloquear las vías respiratorias, ayudando a controlar el asma.

Este aceite esencial sólo debe usarse para inhalación y no debe consumirse por vía oral.

Ingredientes

  • 1 gota de aceite esencial de lavanda;
  • 2 litros de agua hirviendo.

Modo de preparación

Agrega el agua hirviendo y los aceites esenciales de lavanda a un bol, mezclando bien. Luego, debes sentarte en una silla y colocar el recipiente sobre la mesa. Cúbrete la cabeza con una toalla abierta, inclínate hacia adelante y respira el vapor de esta solución durante 5 a 10 minutos. Esta toalla ayuda a mantener la solución vaporizada por más tiempo. Repita este procedimiento una o dos veces al día.

El aceite esencial no debe ser utilizado por niños, mujeres embarazadas o en período de lactancia. Además, no se recomienda utilizar este aceite en casos de ataques agudos de asma, ya que pueden empeorar la inflamación. En estos casos, lo mejor es buscar atención médica lo antes posible o utilizar la bomba prescrita por su médico.

8. Sirope de semilla de calabaza

El jarabe elaborado con semillas de calabaza es otra buena opción como remedio natural para el asma ya que es rico en magnesio, que ayuda a mejorar la capacidad respiratoria de los pulmones, mejorando la respiración. Además, las semillas de calabaza son ricas en sustancias antiinflamatorias que reducen la inflamación de los bronquios, facilitando el paso del aire y reduciendo síntomas como la tos y la dificultad para respirar.

Este jarabe no debe ser utilizado por personas alérgicas a la miel, al propóleo o al polen.

Ingredientes

  • 60 semillas de calabaza;
  • 1 cucharada de miel;
  • 1 taza de agua;
  • 25 gotas de propóleo.

Modo de preparación

Pela las semillas de calabaza, agrégalas con la miel y el agua. Licúa todo en una licuadora y luego agrega el propóleo. Tome 1 cucharada de este jarabe cada 4 horas, cuando su asma sea más grave.

9. Té de uña de gato

Té de uña de gato, preparado con la corteza o raíz de la planta medicinal Uncaria tomentosaEs rico en sustancias antiinflamatorias, como la mitrafilina y los ácidos clorogénico y quínico, que ayudan a tratar la inflamación respiratoria provocada por el asma, así como sus molestias.

Ingredientes

  • 20 g de pieles y raíces de uña de gato;
  • 1 litro de agua.

Modo de preparación

Hervir los ingredientes por 15 minutos, luego apagar el fuego y dejar reposar en el recipiente tapado por 10 minutos. Colar y beber el té hasta 3 veces al día.

El té de uña de gato no debe ser utilizado por niños, mujeres embarazadas o en período de lactancia y personas con problemas estomacales como gastritis o úlceras, por ejemplo.