8 tés para los cólicos intestinales (y cómo prepararlos)

Calambres Síntomas

Algunos tés que se pueden utilizar para los cólicos intestinales son el té de melisa, el té de menta o el té de hinojo. Estos tés contienen sustancias con efectos antiinflamatorios, analgésicos, calmantes y antiespasmódicos, que ayudan a aliviar síntomas como malestar abdominal, exceso de gases, náuseas o sensación de vientre hinchado.

Los cólicos intestinales pueden ser causados ​​por una intolerancia o alergia alimentaria, un consumo excesivo de alimentos que provocan gases intestinales, o incluso por afecciones más graves como el síndrome del intestino irritable, la enfermedad de Crohn o la diverticulitis, por ejemplo. Vea las principales causas de los cólicos intestinales.

Estos tés se pueden utilizar para aliviar los síntomas del cólico intestinal, pero si no hay mejoría en 2 días, se recomienda consultar a su médico de cabecera o gastroenterólogo para que, en caso de ser necesario, se pueda iniciar un tratamiento con medicación.

Los principales tés que ayudan a aliviar los calambres intestinales son:

1. Té de boldo

El té de boldo, preparado con hojas secas de boldo chileno o hojas frescas de boldo brasileño, es rico en negrita y ácido rosmarínico, sustancias con propiedades digestivas, antiinflamatorias, antiespasmódicas y astringentes, que ayudan a reducir la acidez. estómago y ayuda en la digestión de las grasas. Por ello, este té es muy útil para aliviar los cólicos intestinales en situaciones de mala digestión o intolerancia alimentaria, por ejemplo.

Ingredientes:

  • 1 cucharadita de hojas de boldo picadas;
  • 150 ml de agua.

Modo de preparación:

Agrega las hojas de boldo picadas a 150 ml de agua hirviendo. Déjalo reposar de 5 a 10 minutos, cuela y bebe tibio inmediatamente, 2 a 3 veces al día, antes o después de las comidas. Otra opción es beber una taza antes de acostarse para ayudar a la digestión después de cenar.

El té de boldo no está recomendado para mujeres embarazadas o en período de lactancia, personas con hepatitis, problemas de riñón, páncreas o vesícula biliar. Tampoco se recomienda para personas con hipertensión arterial y niños.

2. Té de menta

El té de menta tiene en su composición aceites, como mentol, mentona y limoneno, que tienen acción analgésica y antiespasmódica, ayudando a relajar los músculos intestinales y reducir la formación de gases, lo que reduce las contracciones que provocan los cólicos. intestinal.

Ingredientes:

  • 2 a 3 cucharadas de hojas de menta trituradas, frescas o secas;
  • 150 ml de agua hirviendo.

Modo de preparación:

Coloca las hojas de menta en una taza de té y llénala con agua hirviendo. Déjalo reposar de 5 a 10 minutos y cuela. Este té se debe beber de 3 a 4 veces al día.

3. Té de hinojo

El té de hinojo contiene sustancias con efectos antiinflamatorios, analgésicos, antiespasmódicos y digestivos, como el anetol, el ursol y el alcanfor, que ayudan a aliviar la inflamación intestinal, reduciendo los cólicos intestinales, la diarrea y los gases.

Ingredientes:

  • 1 cucharada de semillas de hinojo;
  • 1 taza de agua hirviendo.

Modo de preparación:

Agrega las semillas de hinojo a la taza de agua hirviendo. Tapar y dejar enfriar durante 10 a 15 minutos. Colar y luego beber de 2 a 3 tazas al día, 20 minutos antes de la comida. Otra opción para preparar este té es utilizar una bolsita de té de hinojo. Descubra otras formas de utilizar el hinojo.

El té de hinojo no debe ser utilizado por mujeres embarazadas o en período de lactancia. Asimismo, este té no es recomendado para personas con antecedentes de epilepsia, hiperestrogenismo y para mujeres con flujo menstrual abundante.

4. Té de manzanilla

El té de manzanilla es rico en compuestos fenólicos como la apigenina, quercetina y patuletina, con propiedades antiinflamatorias y calmantes, que reducen la estimulación del tracto gastrointestinal, aliviando los cólicos.

Ingredientes:

  • 2 cucharaditas de flores secas de manzanilla;
  • 250 ml de agua hirviendo.

Modo de preparación:

Agrega las flores secas de manzanilla a una taza de agua hirviendo, tapa y deja reposar durante unos 5 a 10 minutos. Cuela y bebe hasta 4 tazas de este té al día.

Otra forma de preparar té de manzanilla es utilizando bolsitas de té, que se pueden encontrar en supermercados o farmacias. Vea otras formas de preparar té de manzanilla.

Este té no está recomendado para bebés menores de 6 meses. Además, las personas que estén usando anticoagulantes, sedantes, analgésicos u otros medicamentos deben consultar con un médico antes de beber té de manzanilla, ya que esta planta puede alterar los efectos de algunos medicamentos.

Té con manzanilla simple (Matricaria recutita) Se puede utilizar durante el embarazo y la lactancia. Sin embargo, se debe evitar el té de manzanilla romana, ya que aún no existen estudios que demuestren la seguridad del uso de este tipo de plantas durante el embarazo y la lactancia.

5. Té de bálsamo de limón

Té de melisa, preparado con la planta medicinal. Melissa officinalis, es rico en citral, ácido rosmarínico, geraniol y betacariofileno, componentes con acción antiespasmódica, antiinflamatoria y carminativa, que inhiben la producción de sustancias encargadas de aumentar la contracción intestinal. Además, este té ayuda a aliviar las náuseas, los vómitos y la mala digestión.

Ingredientes:

  • 3 cucharadas de hojas de melisa;
  • 1 taza de agua hirviendo.

Modo de preparación:

Agrega las hojas de melisa al agua hirviendo, tapa y deja reposar 5 minutos. Luego, cuela y bebe de 3 a 4 tazas de este té al día.

El té de bálsamo de limón puede interferir con el efecto de los medicamentos para la tiroides y en estos casos sólo debe tomarse con el consejo de un médico. Además, se recomienda que las mujeres embarazadas o en período de lactancia consulten a su obstetra antes de consumir melisa.

6. Té de jengibre

Jengibre, científicamente llamado Zingiber officinalisTiene compuestos fenólicos, como el gingerol, chogaol y zingerone, que tienen propiedades antioxidantes, antiinflamatorias y antieméticas, siendo muy útil para aliviar los síntomas del cólico intestinal.

Ingredientes:

  • 1 cm de raíz de jengibre;
  • 1 taza de agua.

Modo de preparación:

Pela las rodajas de jengibre y córtalas en trozos más pequeños. Agrega el jengibre a una cacerola, agrega el agua y deja hervir de 5 a 10 minutos. Dejar enfriar, colar y beber hasta 3 tazas de té al día.

Este té no se recomienda para quienes padecen cálculos biliares, enfermedades hemorrágicas o utilizan medicamentos anticoagulantes. Las personas que usan medicamentos para controlar la presión arterial alta y la diabetes solo deben consumir jengibre bajo la supervisión de un médico, ya que puede interferir con el efecto de estos medicamentos, causando potencialmente presión arterial baja e hipoglucemia.

Durante el embarazo el consumo máximo de jengibre debe ser de 1g al día y durante un intervalo máximo de 3 días consecutivos. Sin embargo, el jengibre no debe consumirse cerca del parto, ya que puede aumentar el riesgo de sangrado.

7. Té de eneldo

Té de eneldo, preparado con la planta medicinal. Aneethun graveolensEs rico en aceites como limoneno, carvacrol y timol, con propiedades antiinflamatorias y antiespasmódicas, que ayudan a aliviar los cólicos y gases intestinales, provocados por el síndrome del intestino irritable.

Además, este té también ayuda a aliviar las náuseas y tratar la diarrea y el estreñimiento.

Ingredientes:

  • 1 cucharadita de semillas de eneldo;
  • 1 taza de agua hirviendo.

Modo de preparación:

Coloca el eneldo en la taza de agua hirviendo. Déjalo reposar 10 minutos, cuela y bebe después.

El té de eneldo no debe ser utilizado por niños, mujeres embarazadas o en período de lactancia, ni por personas que tengan diabetes o hipotiroidismo, o que estén en tratamiento con litio.

8. Té de cardamomo

El té de cardamomo es una buena opción como remedio casero para los cólicos intestinales ya que es rico en aceites esenciales que estimulan la producción de ácido en el estómago, regulando las deposiciones y facilitando la eliminación de los gases intestinales.

Ingredientes:

  • 1 cucharadita de semillas de cardamomo;
  • 1 taza de agua hirviendo.

Modo de preparación:

Coloca las semillas de cardamomo en una taza de agua hirviendo y déjalas reposar unos 10 minutos. Luego cuela y bebe la taza antes de las comidas.

El té de cardamomo no debe ser utilizado por personas con cálculos biliares.

Además, este té no debe ser consumido por mujeres que estén embarazadas o en período de lactancia, ya que no existen estudios que acrediten su seguridad en estos casos.