Solución casera para pies cansados: pediluvio y masaje

Tratamientos naturales

Una gran solución casera para tratar los pies cansados ​​y aliviar los dolores del final del día es realizar un automasaje con aceite de almendras, después de un buen baño de pies, ya que esto permite que tus músculos se relajen.

El pediluvio, además de favorecer la relajación, ayuda a favorecer el retorno venoso, es decir, facilita el retorno de la sangre al corazón, reduciendo la hinchazón y favoreciendo la sensación de bienestar.

Para asegurar un efecto relajante es interesante masajear el pie, ya que el pie tiene puntos específicos que, al ser estimulados, pueden ayudar a aliviar la tensión. Mira cómo dar un masaje relajante en los pies.

1. Baño de pies

Darse un baño de pies relajante es bastante fácil, sólo necesitas:

  1. Coloca un poco de agua tibia en un recipiente y agrega 2 cucharadas de sal de mesa;
  2. Deja tus pies en remojo durante 15 a 20 minutos;
  3. Seca bien tus pies y frota un poco de aceite de almendras en tus manos extendiéndolo bien por todos tus pies.

A continuación, para potenciar el efecto relajante del pediluvio se puede realizar un masaje.

2. Cómo hacer un masaje en los pies

Para realizar el masaje debes sentarte con las piernas cruzadas, para poder aplicar una pequeña cantidad de aceite de almendras en tus pies. Lo suficiente para deslizar bien las manos. A continuación, debes seguir estos pasos:

  1. Aplique presión con las yemas de los dedos en la planta del pie, comenzando desde la planta hasta el talón. Luego repite el movimiento hasta la planta del pie, nuevamente, y repite estos movimientos durante 1 minuto;
  2. Empuje el dedo gordo contra la planta del pie, aplicando una ligera presión, deslizándose desde el talón hasta los dedos. Repita según sea necesario hasta que haya presionado todas las áreas de la suela;
  3. Sostenga un dedo del pie con la mano y presione ligeramente, girando la mano hasta masajear todas las partes de cada dedo;
  4. Sostenga todos los dedos de los pies e inclínese hacia adelante, manteniendo la posición durante 30 segundos. Luego, doble los dedos hacia atrás y manténgalos así durante otros 30 segundos.

Un buen consejo para reducir la hinchazón de los pies a lo largo del día es tumbarse y colocar una almohada muy alta debajo de los pies, subiéndolos cada vez que esté recostado o tumbado en la cama o en el sofá. Esta posición ayudará a drenar el exceso de líquido, reduciendo la hinchazón y dejando las piernas más ligeras.

Los pediluvios caseros son una excelente manera de relajar y rejuvenecer los pies después de un día agotador. Puedes crear uno fácilmente en casa con ingredientes simples. Aquí tienes algunas ideas:

  1. Pediluvio de sal y aceites esenciales: Llena una palangana con agua tibia y agrégale sal marina o sales de Epsom para ayudar a relajar los músculos y suavizar la piel. También puedes añadir unas gotas de aceites esenciales como lavanda o menta para disfrutar de un aroma relajante.
  2. Pediluvio de vinagre y bicarbonato de sodio: Mezcla agua tibia con una taza de vinagre de manzana y unas cucharadas de bicarbonato de sodio. Esta mezcla puede ayudar a desodorizar los pies y suavizar la piel.
  3. Pediluvio de té verde: Prepara una infusión concentrada de té verde y agrégala al agua tibia en la palangana. El té verde contiene antioxidantes que pueden ayudar a revitalizar la piel de los pies y dejarlos con una sensación fresca.
  4. Pediluvio de hierbas frescas: Hierve agua y agrégale hierbas frescas como menta, romero o tomillo. Deja que la mezcla repose y se enfríe un poco antes de verterla en la palangana. Las hierbas frescas no solo añaden aroma, sino que también pueden tener propiedades relajantes y revitalizantes.
  1. Pediluvio de limón y sal marina: Exprime el jugo de varios limones en agua tibia y agrega un puñado de sal marina. El limón no solo proporciona un aroma fresco, sino que también puede ayudar a suavizar la piel y eliminar las células muertas.
  2. Pediluvio de aceite de coco y lavanda: Mezcla agua tibia con un poco de aceite de coco derretido y unas gotas de aceite esencial de lavanda. El aceite de coco es excelente para hidratar la piel, mientras que la lavanda tiene propiedades relajantes que pueden ayudarte a desestresarte después de un largo día.
  3. Pediluvio de manzanilla y miel: Prepara una infusión de manzanilla y mezcla el líquido con un poco de miel en agua tibia. La manzanilla es conocida por sus propiedades antiinflamatorias y calmantes, mientras que la miel puede ayudar a suavizar y humectar la piel.
  4. Pediluvio de bicarbonato de sodio y aceite de árbol de té: Añade unas cucharadas de bicarbonato de sodio y unas gotas de aceite esencial de árbol de té al agua tibia. El bicarbonato de sodio puede ayudar a neutralizar olores y suavizar la piel, mientras que el aceite de árbol de té tiene propiedades antimicrobianas que pueden ayudar a combatir infecciones menores.

Recuerda que siempre es importante probar la temperatura del agua antes de sumergir tus pies para evitar quemaduras. Disfruta de tu pediluvio casero y deja que tus pies se relajen y se rejuvenezcan.