qué es, síntomas, causas y tratamiento

Anemia

La anemia perniciosa es un tipo de anemia megaloblástica en la que existe una deficiencia de vitamina B12 en el organismo, provocando síntomas como debilidad, palidez, cansancio y hormigueo en manos y pies.

La anemia perniciosa, también conocida como anemia de Addison, se produce principalmente por la falta en el organismo de una proteína que favorece la absorción de la vitamina B12 (cobalamina), de modo que esta se elimina por la orina.

El diagnóstico de anemia perniciosa se realiza mediante pruebas de laboratorio, en las que se comprueba, por ejemplo, la concentración de vitamina B12 en la orina. El tratamiento se suele realizar mediante suplementación con vitamina B12 y ácido fólico, además de adoptar una dieta saludable rica en vitamina B12.

Síntomas principales

Los principales síntomas de la anemia perniciosa son:

  • Debilidad;
  • Palidez;
  • Dolor de cabeza;
  • Cansancio excesivo;
  • Diarrea;
  • Lengua suave e hinchada;
  • Sensación de estómago lleno;
  • Uñas débiles y quebradizas;
  • Hormigueo en manos y pies;
  • Palpitaciones del corazón;
  • Mareo;
  • Sensación de dificultad para respirar;
  • Irritabilidad;
  • Pies y manos fríos;
  • Aparición de heridas en las comisuras de la boca;
  • Irritabilidad y cambios repentinos de humor;
  • Disminución de la libido.

En los casos más graves de anemia perniciosa, el sistema nervioso puede verse comprometido, lo que puede provocar dificultad para caminar, depresión y confusión mental.

Posibles Causas

La anemia perniciosa se produce debido a la dificultad del cuerpo para absorber la vitamina B12, lo que sucede por la falta del factor intrínseco, que es una proteína que se une a la vitamina B12 para que sea absorbida en el cuerpo.

La causa más probable de la anemia perniciosa es inmunológica: es probable que el sistema inmunológico actúe indebidamente sobre la mucosa gástrica, provocando su atrofia e inflamación crónica, lo que se traduce en un aumento de la secreción de ácido clorhídrico por parte del estómago y una disminución de la producción de factor intrínseco. , disminuyendo así la absorción de vitamina B12.

Además de la causa inmunológica, la anemia perniciosa puede ser causada por situaciones como la enfermedad celíaca, la homocistinuria, la deficiencia de cobalto, la desnutrición infantil, el tratamiento con ácido paraminosalicílico y la mala alimentación durante el embarazo, que pueden provocar que el bebé nazca con anemia perniciosa.

Cómo se hace el diagnóstico

El diagnóstico de anemia perniciosa debe ser realizado por el médico inicialmente con base en la evaluación de los signos y síntomas que presenta la persona y los hábitos alimentarios. Sin embargo, para confirmar el diagnóstico se suelen realizar análisis de sangre y de imágenes. Por ello, el médico puede recomendar la realización de un hemograma, para evaluar la cantidad de glóbulos rojos y hemoglobina que circulan en la sangre, además de la prueba de Schilling, que evalúa la cantidad de vitamina B12 en la orina.

Una de las pruebas de imagen que se suelen recomendar en la investigación de la anemia perniciosa es la endoscopia digestiva, ya que ayuda a comprobar si existen lesiones en el estómago. Entiende cómo es la endoscopia.

También se puede solicitar un mielograma, que es la prueba que indica cómo está funcionando la médula ósea, que en el caso de la anemia perniciosa revela la presencia de precursores eritroides grandes e inmaduros. Sin embargo, esta prueba es invasiva y rara vez se solicita para ayudar a diagnosticar la anemia. Vea qué pruebas confirman la anemia.

Cómo se realiza la prueba de Schilling para la vitamina B12

La prueba de Schilling es la prueba de laboratorio normalmente indicada para confirmar el diagnóstico y consiste en la administración oral de vitamina B12 con marcador y, al cabo de 2 horas, una inyección de vitamina B12 sin marcador. Después de 24 horas, la orina se recolecta y analiza en el laboratorio.

Si se verifica la presencia de la vitamina en la orina, de 3 a 7 días después del primer examen, se administra factor intrínseco asociado a la vitamina B12 y, luego de 24 horas, se realiza una nueva recolección de orina para verificar si se está eliminando la vitamina B12. . Si no la hay, se dice que la prueba es positiva para anemia perniciosa, ya que se ha suministrado al organismo una proteína que no se produce y que soluciona el problema.

Tratamiento de la anemia perniciosa

El tratamiento de la anemia perniciosa se puede realizar con inyecciones de vitamina B12 que contengan entre 50 y 1000 µg o comprimidos orales que contengan 1000 µg de vitamina según recomendación médica. Además, se puede recomendar el uso de ácido fólico para prevenir consecuencias neuronales.

El tratamiento normalmente se realiza durante 1 mes, y suele ser suficiente para resolver la anemia y, en consecuencia, los síntomas. Sin embargo, hay casos en los que es necesario mantener la suplementación con vitamina B12 de por vida.

También es importante consultar a un nutricionista para que pueda tener una mejor orientación sobre los alimentos que se deben consumir en la anemia perniciosa, siendo normalmente recomendado el consumo de carnes rojas, huevos y queso, por ejemplo. Vea qué alimentos son ricos en vitamina B12.