qué es, síntomas, causas y tratamiento

Enfermedades

La erisipela ampollosa es un tipo más grave de erisipela, generalmente causada por una infección con la bacteria Estreptococo betahemolítico del grupo Aque penetra la piel a través de heridas o lesiones, provocando síntomas como llagas grandes y rojas en la piel y ampollas llenas de un líquido transparente o amarillento.

Este tipo de erisipela afecta a capas más profundas de la piel y puede, en algunos casos, provocar complicaciones y afectar la capa grasa o incluso los músculos y provocar acumulación de pus, necrosis cutánea o llegar a la circulación sanguínea, provocando una infección generalizada. Comprende qué es la erisipela.

El tratamiento de la erisipela ampollosa debe iniciarse lo antes posible para evitar complicaciones, y el dermatólogo normalmente recomienda antibióticos para combatir la infección, cremas para aplicar sobre la piel afectada y mejorar los síntomas, y en los casos más graves, hospitalización para recibir medicación al el hospital. vena.

Contenido sensible

Esta imagen puede contener contenido que resulte incómodo para algunas personas.

Imagen ilustrativa número 2

Síntomas de erisipela ampollosa.

Los principales síntomas de la erisipela ampollosa son:

  • Heridas cutáneas extensas, inflamadas y dolorosas;
  • Ampollas en la piel con líquido transparente, amarillo o pardusco;
  • Dolor en la ingle, cuando la herida afecta las piernas o los pies;
  • Dolor, enrojecimiento e hinchazón de la piel afectada;
  • Aumento de la temperatura local;
  • Oscurecimiento de la región afectada;
  • Fiebre, en los casos más graves.

Cuando la infección empeora, especialmente cuando el tratamiento no se realiza correctamente, es posible llegar a capas más profundas de la piel, como el tejido subcutáneo e incluso puede provocar destrucción de los músculos, como ocurre en la fascitis necrotizante.

Además, si las lesiones no se tratan rápidamente, es posible que las bacterias lleguen al torrente sanguíneo, provocando una infección generalizada que puede poner en riesgo la vida.

Por ello, es importante consultar a un dermatólogo o médico de cabecera siempre que aparezcan síntomas de erisipela ampollosa, para poder iniciar inmediatamente el tratamiento más adecuado.

Si experimenta síntomas de erisipela, programe una cita con un dermatólogo en la región más cercana:

¡Cuidar tu salud nunca ha sido tan fácil!

¿La erisipela ampollosa es contagiosa?

La erisipela ampollosa no es contagiosa, ya que aparece cuando bacterias que ya viven en la piel y en el ambiente logran penetrar la piel a través de una herida, una picadura de insecto o sabañones en los pies, por ejemplo.

Sin embargo, en algunos casos, cuando la erisipela ampollosa no se trata adecuadamente y la persona tiene heridas abiertas, la bacteria puede transmitirse a otras personas a través del contacto directo con la herida, el líquido contenido en las ampollas o ropa u objetos contaminados.

Cómo confirmar el diagnóstico.

El diagnóstico de erisipela ampollosa lo realiza un dermatólogo o médico general, mediante la evaluación de los síntomas, las características de la lesión y los antecedentes de salud.

Además, se podrán solicitar pruebas como el hemograma para controlar la gravedad de la infección, y pruebas de imagen como la tomografía computarizada o la resonancia magnética en el caso de lesiones que afecten a capas, músculos o huesos muy profundos.

Si el médico sospecha una infección generalizada, puede solicitar, por ejemplo, un hemocultivo para identificar qué bacteria está causando la infección y así recomendar el mejor antibiótico.

Otra prueba que puede solicitar el médico es una prueba de cultivo del líquido contenido en las ampollas, para valorar la presencia de bacterias y de qué tipo son.

Posibles Causas

La erisipela ampollosa es causada por una infección bacteriana. Estreptococo beta-hemolítico grupo A, también conocido como estreptococo piógenosque penetra en la piel a través de pequeñas lesiones o heridas, como picaduras de insectos, rasguños, picaduras o sabañones en los pies, por ejemplo.

Algunos factores pueden aumentar el riesgo de desarrollar erisipela ampollosa, como:

  • Historia de erisipela o celulitis infecciosa;
  • Úlceras por presión;
  • Úlcera venosa crónica;
  • Obesidad;
  • Diabetes no controlada;
  • Obstrucción o insuficiencia linfática;
  • Infección por el virus del VIH;
  • Insuficiencia venosa;
  • Fístula arteriovenosa;
  • Enfermedades autoinmunes.

La erisipela ampollosa es más común en personas con el sistema inmunológico debilitado o mala circulación, ya que en estos casos las bacterias pueden proliferar más fácilmente en la piel.

En algunos casos, una infección cutánea secundaria con bacterias, como Estafilococo aureus, Proteo es maravilloso, Pseudomonas aeruginosa o enterococo faecalisPor ejemplo.

Cómo se realiza el tratamiento.

La erisipela ampollosa se trata con antibióticos recetados por un dermatólogo o médico de cabecera, y la primera opción generalmente es la penicilina benzatínica o las cefalosporinas. Las personas alérgicas a la penicilina deben ser evaluadas individualmente.

Además, durante el tratamiento son importantes algunas medidas como descansar, aplicar compresas frías en la zona, mantener el cuerpo hidratado y elevar las piernas para reducir la hinchazón.

En el caso de erisipela recurrente, el médico puede recomendar un tratamiento con penicilina G benzatínica cada 21 días, como forma de prevenir nuevos casos de la enfermedad. Vea más sobre las formas de tratamiento con antibióticos, ungüentos y cuándo es necesario el ingreso en el hospital.

Además, durante el tratamiento de la erisipela, se recomienda que la enfermera realice vendajes, con una correcta limpieza de la lesión, eliminación de secreciones y tejidos muertos, además del uso de pomadas que ayuden en el proceso de cicatrización, como hidrocoloide, hidrogel. , papaína o colagenasa, dependiendo de las características de la lesión de cada persona. Vea cómo hacer un apósito para heridas.

Posibles complicaciones

La erisipela ampollosa es un tipo de erisipela más grave, que puede provocar algunas complicaciones, como abscesos cutáneos, infecciones de huesos o articulaciones, gangrena, infección generalizada o infecciones de las válvulas cardíacas.

Por lo tanto, el tratamiento de la erisipela ampollosa debe iniciarse lo antes posible, con orientación de un dermatólogo o médico general, y así evitar complicaciones que puedan poner en riesgo la vida.