qué es, para qué sirve y cómo se hace

Exámenes

El mapeo de retina, también conocido como examen de fondo de ojo o fundoscopia, es un examen en el que el oftalmólogo puede observar el gel ocular (humor vítreo), el nervio óptico, los vasos sanguíneos y el tejido del ojo encargado de capturar las imágenes. , pudiendo detectar cambios y permitir la indicación de tratamiento.

Además, el mapeo de retina también puede estar indicado en bebés prematuros, de 32 semanas o menos, o que pesen 1.500 g o menos, para evaluar la presencia de retinopatía del prematuro, un cambio común en los bebés prematuros que puede provocar daños irreversibles si no. tratado rápidamente. Entender mejor qué es la retinopatía del prematuro y cómo se debe tratar.

El mapeo de retina es realizado de forma gratuita por el SUS, cuando está indicado, sin embargo, también puede realizarse en clínicas privadas, por un precio que varía según la ubicación y la clínica donde se realiza el examen.

Para qué sirve

El mapeo de retina está indicado para identificar lesiones y cambios causados ​​por:

  • Enfermedades de los ojoscomo glaucoma, desprendimiento de retina, tumor, inflamación, falta de flujo sanguíneo o intoxicación por medicamentos, por ejemplo;
  • Enfermedades sistémicas que causan daño ocular.como diabetes, hipertensión arterial, enfermedades reumáticas, enfermedades neurológicas o enfermedades de la sangre.

Además, el mapeo de retina es un examen que se puede realizar siempre que haya un cambio en la visión que no pueda corregirse con el uso de gafas.

El examen forma parte del examen ocular de rutina, pero también sirve como herramienta para diagnosticar problemas que están provocando una disminución de la visión, incluso con la mejor corrección posible, ya sea con gafas o lentes de contacto, por ejemplo.

como se hace

El mapeo de retina es un examen que se realiza durante una consulta con un oftalmólogo, que no causa dolor. Para realizarlo se utiliza un dispositivo llamado oftalmoscopio binocular indirecto y lentes accesorias. Luego, se proyecta un haz de luz en la parte posterior del ojo, lo que permite al médico observar la región.

Con esta observación, el oftalmólogo podrá identificar posibles cambios y, si es necesario, ordenar otras pruebas, como una tomografía, o incluso recomendar tratamientos, como medicamentos para tratar la inflamación o una cirugía para reposicionar un desprendimiento de retina, por ejemplo.

Para realizar el examen, el médico podrá recomendar la dilatación de la pupila, realizada con colirio aplicado también durante la consulta, poco antes del examen, por lo que se recomienda contar con un acompañante que ayude en el regreso a casa.

Consulte también otros exámenes de la vista que se pueden realizar para evitar complicaciones de la visión.

¿Quién debería hacer el examen?

El mapeo de retina se debe realizar con mayor frecuencia en los casos en los que existe mayor probabilidad de tener algunos cambios en la retina, como por ejemplo:

  • Personas mayores de 50 años;
  • Pacientes con enfermedades crónicas como hipertensión arterial, diabetes o enfermedades reumatológicas;
  • Personas con miopía;
  • Personas que utilizan medicamentos que pueden resultar tóxicos para la retina, como cloroquina, clorpromazina, tamoxifeno o isotretinoína;
  • Historia familiar o personal de desprendimiento de retina;
  • Después de traumatismos o lesiones oculares.

Con el mapeo de retina es posible detectar precozmente los principales cambios en la retina o enfermedades oculares en general, de modo que el tratamiento se pueda realizar rápidamente, evitando complicaciones, como la pérdida de visión.