El té de ajo se puede utilizar para combatir la tos, la gripe y los resfriados, además de ayudar a fortalecer el sistema inmunológico, reducir el colesterol malo y controlar la presión arterial alta, ya que tiene propiedades antioxidantes, antivirales e inmunomoduladoras.
Además, este té también puede ayudarte a perder peso, ya que tiene acción termogénica, lo que ayuda a aumentar la temperatura corporal y acelerar el metabolismo, facilitando la quema de grasas.
El té de ajo se debe preparar con ajo machacado para que la aliinasa transforme la aliina en alicina, que es la principal sustancia que tiene propiedades medicinales. Además, para mejorar las propiedades del té puedes añadir limón, miel o jengibre, por ejemplo.
![Imagen ilustrativa número 1](https://storelatina.com/wp-content/uploads/2024/03/Garlic-tea-what-it-is-for-and-how-to-make.jpg)
Para qué sirve
El té de ajo está recomendado para:
1. Combatir la gripe y los resfriados
El té de ajo es rico en alicina, un compuesto azufrado, con propiedades fortalecedoras del sistema inmunológico, que ayuda a combatir gripes y resfriados, reduciendo su duración.
2. Fortalecer el sistema inmunológico
Además de la alicina, el té de ajo tiene en su composición vitamina C, con acción antioxidante, que en conjunto ayudan a fortalecer el sistema inmunológico y combatir virus, bacterias y hongos.
3. Combatir la tos
El té de ajo tiene propiedades expectorantes, que ayudan a combatir la tos, ya que hace que la flema sea más líquida, facilitando su eliminación.
Además, el té de ajo tiene propiedades antiinflamatorias que ayudan a reducir la inflamación pulmonar. Consulte otras formas caseras de combatir la tos.
4. Controlar la presión arterial alta
El té de ajo puede ayudar a controlar la presión arterial alta de leve a moderada, ya que tiene un efecto vasodilatador, es decir, aumenta la dilatación de los vasos sanguíneos, facilitando el flujo de sangre en el cuerpo, lo que disminuye la presión arterial.
5. Reducir el colesterol
El té de ajo tiene una acción antioxidante e hipolipemiante, lo que ayuda a reducir el colesterol malo (LDL) y los triglicéridos, al inhibir su oxidación, y de esta forma evita la formación de placas grasas en las arterias. Vea otras formas naturales de reducir el colesterol.
6. Prevenir enfermedades cardiovasculares
La alicina presente en el té de ajo tiene una poderosa acción antioxidante, que ayuda a reducir el colesterol malo y los triglicéridos que son los responsables de la formación de placas grasas en las arterias.
Además, el té de ajo ayuda a reducir la presión arterial e inhibir la agregación plaquetaria, previniendo la formación de coágulos dentro de los vasos sanguíneos.
Así, este té puede reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares, como la aterosclerosis, el infarto o el ictus.
7. Promover la pérdida de peso
La alicina presente en el té de ajo también puede ayudar en la pérdida de peso, ya que tiene propiedades termogénicas, acelerando la quema de grasa corporal.
De esta forma, el té de ajo puede ayudar en el tratamiento de la obesidad o el sobrepeso.
8. Cicatrización de heridas
El té de ajo puede ayudar a curar heridas en la piel, ya que tiene efectos antiinflamatorios, antisépticos y antimicrobianos.
Además, cuando el té se aplica sobre las heridas de la piel, ayuda a acelerar la formación de tejido nuevo y mejorar el flujo sanguíneo en la región.
9. Prevenir el envejecimiento prematuro
El té de ajo también puede ayudar a prevenir el envejecimiento prematuro de la piel, ya que la vitamina C y la alicina presentes en el té tienen acción antioxidante, lo que previene el daño causado por los radicales libres en las células.
10. Ayuda a controlar la diabetes
El té de ajo también puede ayudar a controlar la diabetes tipo 2, ya que parece reducir los niveles de azúcar en sangre cuando se toma antes de las comidas.
De esta forma, este té puede ayudar en el tratamiento convencional de la diabetes recomendado por el médico. Vea otros beneficios del ajo para la salud.
Cómo hacer té de ajo
El té de ajo debe prepararse con ajo fresco, machacado o picado, y puede hacerse puro o añadiendo miel, limón o jengibre, para mejorar sus propiedades medicinales.
1. Té de ajo simple
El té de ajo natural es un excelente remedio natural para ayudar a fortalecer el sistema inmunológico, mejorar la salud cardiovascular o curar heridas en la piel.
Ingredientes
- 1 diente de ajo machacado o picado;
- 1 taza de agua.
Modo de preparación
Hervir el agua, apagar el fuego y añadirla a la taza con el ajo machacado. Déjalo reposar unos 5 minutos, cuela, espera a que se enfríe y bebe 1 taza de té al día.
Para curar heridas en la piel, empape una compresa esterilizada en té de ajo y aplíquela en el área de la piel con la herida.
2. Té de ajo con limón
El té de ajo con limón, además de tener alicina, es rico en vitamina C procedente del limón, teniendo propiedades antimicrobianas, antiinflamatorias y antioxidantes, que fortalecen el sistema inmunológico, ayudando a aliviar algunos síntomas de gripe y resfriados, además de combatir la tos. .
Ingredientes
- 1 diente de ajo;
- 200 ml de agua;
- 1 cucharada de jugo de limón.
Modo de preparación
Hierve el agua. Luego, agrega el diente de ajo machacado o picado al agua hirviendo, dejándolo reposar de 5 a 10 minutos. Colar, agregar jugo de limón y beber.
3. Té de ajo con jengibre
El té de ajo con jengibre tiene propiedades antioxidantes y antiinflamatorias debido a la alicina, presente en el ajo, y a compuestos fenólicos como el gingerol, chogaol y zingerona, provenientes del jengibre.
Este té se puede utilizar para combatir gripes, resfriados, tos, ya que ayuda a fortalecer el sistema inmunológico.
Además, este té se puede utilizar para ayudarle a perder peso.
Ingredientes
- 3 dientes de ajo, pelados y cortados por la mitad;
- 1 cm de raíz de jengibre o ½ cucharadita de jengibre en polvo;
- 3 tazas de agua;
- Miel para endulzar (opcional).
Modo de preparación
Hervir agua con ajo. Retirar del fuego y agregar jengibre y miel. Colar y servir después.
El jengibre no debe ser consumido por personas que toman anticoagulantes, por lo que debe eliminarse del té en estos casos.
4. Té de ajo con miel
El té de ajo con miel tiene propiedades expectorantes, antioxidantes y antiinflamatorias y puede utilizarse para combatir la tos y acelerar la recuperación de resfriados y gripe.
Además, la miel ayuda a lubricar la garganta y reducir la irritación de los tejidos, aliviando la tos.
Ingredientes
- 1 diente de ajo machacado o picado;
- 1 cucharada de miel;
- 1 taza de agua.
Modo de preparación
Hervir el agua, apagar el fuego y añadirla a la taza con el ajo machacado. Déjalo reposar unos 5 minutos. Luego cuela, espera a que se enfríe, agrega miel y bebe 1 taza de té al día.
5. Té de ajo con limón y propóleo
El té de ajo con limón y propóleo también se puede utilizar para fortalecer el sistema inmunológico y combatir infecciones, aliviar los síntomas del resfriado y la gripe y combatir la tos.
Ingredientes
- 1 diente de ajo machacado o picado;
- 20 a 30 gotas de propóleo;
- jugo de 1 limón;
- ½ vaso de agua.
Modo de preparación
Hervir el agua, apagar el fuego y añadirla a una taza con el ajo. Déjalo reposar de 5 a 10 minutos. Luego cuela, espera a que se enfríe, añade el zumo de limón y el propóleo y bebe.
Posibles efectos secundarios
Los efectos secundarios más comunes del té de ajo son mal aliento, mal olor corporal, gases intestinales, dolor de estómago, diarrea o barriga hinchada.
Además, aunque es poco común, este té puede provocar reacciones alérgicas graves en personas alérgicas al ajo. Sepa cómo identificar los síntomas de una reacción alérgica grave.
¿Quién no debería tomar?
El té de ajo no debe ser consumido por niños menores de 2 años ni por personas que tengan gastritis, úlceras, presión arterial baja y sangrado.
Además, en el caso de mujeres embarazadas o en período de lactancia, el té de ajo debe utilizarse con consejo médico, ya que utilizado en exceso puede tener efecto abortivo, afectar el ciclo menstrual o cambiar el olor de la leche materna.
En el caso de personas que toman medicamentos para la hipertensión arterial o anticoagulantes, el té de ajo sólo debe utilizarse con recomendación de un médico.
El té de ajo que contiene miel o propóleo no debe ser consumido por personas alérgicas a la miel, el propóleo o el polen. En estos casos, estos ingredientes deben eliminarse de la receta.