La disfunción eréctil es un problema relativamente común, pero tiene cura. Para ello, es necesario someterse a una adecuada evaluación médica por parte de un urólogo, para identificar la causa del problema y definir la mejor opción de tratamiento.
Algunas de las terapias más utilizadas para tratar la disfunción eréctil incluyen la terapia de pareja, la toma de medicamentos, la aplicación de inyecciones, el uso de dispositivos de vacío o, como último recurso, la cirugía para colocar una prótesis de pene, por ejemplo.
Es importante resaltar que mantener la calidad de vida y la salud es de fundamental importancia para evitar la disfunción eréctil. Controlar el sedentarismo, la obesidad, el estrés, el colesterol, la hipertensión arterial y la diabetes es fundamental. También se debe evitar el uso de drogas, cigarrillos y el consumo excesivo de alcohol.
El tratamiento para la disfunción eréctil depende de la causa que pueda estar en su origen, como por ejemplo:
1. Estrés y presión psicológica
Normalmente este tipo de disfunción eréctil, conocida como “impotencia psicológica”, debe tratarse mediante atención psicológica o psiquiátrica, preferentemente en pareja.
La causa psicológica es bastante común y puede ocurrir como resultado del exceso de trabajo, estrés, malas experiencias sexuales que ocurrieron en la infancia o incluso en la vida adulta. La disfunción eréctil suele estar relacionada con un evento específico y tiene una aparición repentina, como después de una separación matrimonial, un cambio en el afecto por la pareja o problemas económicos.
Normalmente, en casos de disfunción psicológica se mantienen las erecciones matutinas y nocturnas, siendo necesaria la medicación sólo si existe alguna otra causa orgánica asociada.
2.Diabetes
La disfunción eréctil que surge debido a la diabetes tiene cura y es necesario mantener bajo control todos los factores relacionados con la enfermedad. Es necesario controlar adecuadamente los cambios vasculares, las complicaciones neurológicas, los factores psicológicos, los cambios hormonales y los efectos secundarios de los medicamentos típicos para la diabetes.
El tratamiento de este tipo de disfunción se realiza controlando los niveles de azúcar y la presión arterial, manteniendo un peso ideal, practicando ejercicio físico y visitando al médico periódicamente.
3. Consumo de cigarrillos
El primer paso para tratar la disfunción eréctil a través del cigarrillo es dejar de fumar. Fumar reduce el flujo sanguíneo en los vasos sanguíneos del órgano sexual masculino, dificultando o incluso impidiendo la erección, provocando disfunción.
Estos cambios pueden ocurrir lentamente, pero todo dependerá de la cantidad de cigarrillos fumados por día, la duración del hábito de fumar y la asociación con otros factores de riesgo como la presión arterial alta y la diabetes.
El médico también puede recetar algún tipo de tratamiento para ayudar a dejar de fumar o medicamentos que actúan directamente sobre el órgano masculino durante el contacto íntimo, como sildenafil y clorhidrato de apomorfina.
Otros tratamientos para la disfunción eréctil
Básicamente, el tratamiento para la disfunción eréctil puede incluir:
- Tratamiento psicológico: si la causa de la disfunción es estrés, ansiedad, depresión;
- Medicamentos: como Viagra u hormonas masculinas;
- Comida especial: a base de condimentos como ajo, cebolla y orégano;
- Inyecciones en el pene: Con medicación indicada antes del contacto íntimo;
- Cirugía: Colocación de dispositivos que ayuden con la erección;
- Ejercicios para disfunción eréctil;
- Dispositivo de vacío: estimula la erección aumentando el flujo sanguíneo a la zona.
Cualquiera que sea el origen de la disfunción eréctil, suele existir una cura. Todo lo que un hombre necesita hacer es buscar ayuda médica y comenzar el tratamiento lo antes posible para mejorar su calidad de vida.
