Come ridurre il rischio di trombosi dopo l'intervento chirurgico

Cómo reducir el riesgo de trombosis después de la cirugía

Enfermedades

Cualquier cirugía puede aumentar el riesgo de desarrollar trombosis, ya que es común permanecer mucho tiempo quieto tanto durante como después del procedimiento, lo que perjudica la circulación. El riesgo de trombosis es mayor en el postoperatorio de cirugías complejas o que duran más de 30 minutos, como la cirugía de tórax, corazón o abdominal, como la cirugía bariátrica, por ejemplo.

Por lo tanto, para evitar la trombosis después de la cirugía, se recomienda comenzar a realizar caminatas cortas inmediatamente después de la aprobación del médico, usar medias elásticas durante unos 10 días o hasta que sea posible volver a caminar con normalidad, mover las piernas y los pies mientras está acostado y tomando Medicamentos anticoagulantes para evitar la formación de coágulos. Revisa también todos los cuidados después de la cirugía.

La trombosis es la formación de coágulos o trombos dentro de los vasos sanguíneos, impidiendo el flujo sanguíneo. Obtenga más información sobre la trombosis.

Qué hacer

Para prevenir la trombosis después de la cirugía, su médico puede recomendarle:

1. Camine lo antes posible

El paciente operado debe caminar en cuanto sienta poco dolor y no haya riesgo de que la cicatriz se rompa, ya que el movimiento estimula la circulación sanguínea y reduce el riesgo de formación de coágulos. Normalmente el paciente puede caminar después de 2 días, pero depende de la cirugía y del consejo del médico.

2. Usa medias elásticas

El médico puede recomendar el uso de medias elásticas de compresión incluso antes de la cirugía, las cuales deben usarse por un período de alrededor de 10 a 20 días, hasta que el movimiento del cuerpo a lo largo del día se normalice y sea posible realizar actividades. físico, retirado únicamente para la higiene corporal.

La media más utilizada es la de compresión media, que ejerce una presión en torno a los 18-21 mmHg, que es capaz de comprimir la piel y estimular el retorno venoso, pero el médico también puede recomendar medias elásticas de alta compresión, con una presión entre 20-30 mmHg. , en determinados casos de mayor riesgo, como personas con varices gruesas o avanzadas, por ejemplo.

Las medias elásticas también son aconsejables para cualquier persona que tenga problemas de circulación venosa, personas encamadas, que se sometan a tratamientos encamados o que padezcan enfermedades neurológicas u ortopédicas que dificulten el movimiento. Descubre más detalles sobre para qué sirven los calcetines de compresión y cuándo usarlos.

3. Eleva tus piernas

Esta técnica facilita el retorno de la sangre al corazón, lo que evita la acumulación de sangre en piernas y pies, además de reducir la hinchazón de las piernas.

Cuando sea posible, se aconseja al paciente que mueva los pies y las piernas, doblándose y estirándose unas 3 veces al día. Estos ejercicios pueden ser guiados por el fisioterapeuta estando aún en el hospital.

4. Utilice medicamentos anticoagulantes

Medicamentos que ayudan a prevenir la formación de coágulos o trombos, como la Heparina inyectable, que puede ser recomendada por el médico, especialmente cuando se trata de una cirugía prolongada o que requerirá reposo prolongado, como una cirugía abdominal, torácica u ortopédica.

El uso de anticoagulantes puede estar indicado hasta que sea posible caminar y mover el cuerpo con normalidad. Estos remedios también suelen estar indicados durante una estancia hospitalaria o durante un tratamiento en el que la persona necesita descansar o recostarse durante un tiempo prolongado. Entender mejor la función de estos medicamentos, qué son los anticoagulantes y para qué sirven.

5. Masajea tus piernas

Realizar un masaje de piernas cada 3 horas, con aceite de almendras o cualquier otro gel de masaje, es también otra técnica que estimula el retorno venoso y dificulta la acumulación de sangre y la formación de coágulos.

Además, se recomienda la fisioterapia motora y otros procedimientos que pueda recomendar el médico, como la estimulación eléctrica de los músculos de la pantorrilla y la compresión neumática externa intermitente, que se realiza con dispositivos que estimulan los movimientos sanguíneos, especialmente en personas que no pueden mover las piernas. , como pacientes en coma.

¿Quién tiene mayor riesgo de sufrir una trombosis después de la cirugía?

El riesgo de que se produzca una trombosis después de la cirugía es mayor cuando el paciente tiene más de 60 años, especialmente las personas mayores que están encamadas, después de accidentes o derrames cerebrales, por ejemplo. Sin embargo, otros factores que pueden aumentar el riesgo de trombosis venosa profunda después de la cirugía son:

  • Cirugía realizada con anestesia general o epidural;
  • Obesidad;
  • De fumar;
  • Uso de anticonceptivos u otras terapias de reemplazo hormonal;
  • Tener cáncer o someterse a quimioterapia;
  • Ser portador de sangre tipo A;
  • Tiene enfermedades cardíacas, como insuficiencia cardíaca, varices o problemas sanguíneos como trombofilia;
  • Cirugía realizada durante el embarazo o poco después del nacimiento;
  • Si hay una infección generalizada durante la cirugía.

Cuando se forma un trombo debido a una cirugía, existe una alta probabilidad de desarrollar una embolia pulmonar, ya que los coágulos reducen u obstruyen el paso de la sangre y se alojan en los pulmones, situación que es grave y provoca riesgo de muerte.

Además, también pueden aparecer hinchazón, varices y piel amarronada en las piernas, que en casos más graves puede derivar en gangrena, que es la muerte de las células por falta de sangre.