¡Creo que la sopa de frijoles es como Brasil! Perfecto para los días de juego, y en este clima más frío, ¡perfecto! ¡La mejor parte es que es súper fácil de hacer y rinde muchísimo!
Empiezo preparando el embutido que lo acompañará. Si lo prefieres, puedes utilizar también tocino picado. Yo estoy usando una de esas salchichas finas que venden en paquetes en los supermercados y ya están cocidas, pero podéis usar pepperoni, paio, lo que más os guste. Simplemente pícalo finamente y ponlo en una sartén. Como yo uso antiadherente, ni siquiera hace falta añadir aceite, porque se suelta y se fríe en su propia grasa. Luego simplemente retíralo de la sartén y colócalo sobre una toalla de papel para dejarlo secar.
Ahora cocina a presión los frijoles negros con solo una hoja de laurel y agua. Si no sabes cómo realizar este paso, haz clic aquí para ver una publicación que te ayudará.
A continuación sofreímos en un poco de aceite de oliva media cebolla picada y 3 dientes de ajo picados. Agrega 2 tazas de frijoles cocidos con el caldo y unas gotas de salsa de pimienta (opcional). Agrega sal y deja hervir unos minutos. Como la idea es hacer un caldo, no es necesario que quede muy espeso, sino que depende del gusto de cada uno.
Ahora solo retira la cantidad de frijoles que desees y licúalos en una licuadora o batidora. Si crees que queda demasiado espeso, añade un poco de agua al licuar.
Ponlo en tazas o vasitos (estos lindos los compré en São Paulo, en el barrio Liberdade), agrega algunas salchichas y cebolletas para darle un toque al final.
¡Haz clic para votar en esta publicación!