8 remedios caseros para eliminar los callos

Tratamientos naturales

Algunos remedios caseros para eliminar los callos, como el exfoliante de harina de maíz y aceite de almendras, el vinagre de manzana, el aceite de ricino o la solución de bicarbonato de sodio, ayudan a exfoliar la piel y aumentar la suavidad, eliminando las células muertas, aliviando el dolor y las molestias de los callos.

Los callos o callosidades son zonas duras situadas en la capa más externa de la piel que surgen debido al roce constante al que se ve sometida la zona, afectando normalmente a manos, pies o codos.

Estos remedios caseros pueden ayudar a eliminar los callos, sin embargo, se recomienda consultar con un dermatólogo si los callos aparecen con frecuencia, causan dolor o malestar, o no mejoran en 1 semana con medidas caseras, para que se indique el tratamiento más adecuado. , que puede implicar el uso de medicamentos tópicos. Consulte qué remedios pueden recomendarse para tratar los callos.

1. Exfoliante de harina de maíz y aceite de almendras

Una excelente manera de eliminar los callos es masajear los pies con harina de maíz y sal marina, que ayudan a eliminar las durezas. Además, la presencia de aceite esencial de menta ayuda a revitalizar la piel y el aceite de almendras tiene una acción hidratante.

Ingredientes

  • 45 g de harina de maíz;
  • 1 cucharada de sal marina;
  • 1 cucharadita de aceite de almendras;
  • 3 gotas de aceite esencial de menta.

Modo de preparación

Mezcla todos los ingredientes en un bol y agrega agua tibia hasta formar una pasta consistente. Luego, masajea los pies limpios y húmedos con el exfoliante, centrándote en las zonas ásperas con callos y luego lava con agua tibia y jabón.

2. Crema de limón y pachulí

El aceite esencial de limón y la manteca de cacao son excelentes para suavizar e hidratar los callos, mientras que el aceite esencial de pachulí trata la piel agrietada.

Ingredientes

  • 60 g de manteca de cacao;
  • 10 gotas de aceite esencial de limón;
  • 5 gotas de aceite esencial de pachulí.

Modo de preparación

Coloca la manteca de cacao en una sartén pesada y calienta a fuego lento hasta que se derrita, luego retira la sartén del fuego y agrega los aceites esenciales de limón y pachulí a la mantequilla derretida, revolviendo. Vierte la mezcla en un biberón, déjala enfriar y masajea tus pies con la crema antes de ir a dormir.

3. Vinagre de manzana

La acidez del vinagre de manzana ayuda a suavizar los callos y acelera el proceso de curación.

Ingredientes

  • 1 hisopo de algodón;
  • 1 cucharada de vinagre de manzana.

Modo de preparación

Sumerja un hisopo de algodón en vinagre de sidra de manzana, aplíquelo sobre los callos antes de acostarse y déjelo actuar durante la noche. Al día siguiente, exfolia la zona con una piedra pómez y aplica un poco de aceite de coco o de oliva para hidratar. Repita según sea necesario hasta que desaparezca el callo.

4. Té de manzanilla

El té de manzanilla ayuda a calmar la piel, además de suavizar la piel callosa y aliviar las molestias.

Ingredientes

  • 1 cucharadita de flores secas de manzanilla;
  • 1 litro de agua.

Modo de preparación

Pon a hervir el agua y luego apaga el fuego. Agrega las flores de manzanilla a esta agua, tapa y deja reposar por 5 minutos.

Luego, añade este té a un recipiente, espera a que se caliente y sumerge tus pies con callos en esta solución, dejándolo en remojo durante unos 10 a 15 minutos. Pasado este periodo, lava tus pies con agua y jabón, ya que la manzanilla puede dejar tu piel manchada. Secar bien y aplicar una crema hidratante.

Otra opción es utilizar bolsitas de té de manzanilla en las zonas con callos.

5. Baño de pies con sales de Epsom

Las sales de Epsom son ricas en sulfato de magnesio que la piel absorbe fácilmente, lo que facilita el flujo sanguíneo, reduce la hinchazón y el dolor de los callos en los pies y promueve el ablandamiento de los callos.

Ingredientes

  • ½ taza de sales de Epsom;
  • 2 a 3 litros de agua tibia.

Modo de preparación

Agrega las sales de Epsom y el agua tibia a un recipiente hasta que las sales se disuelvan por completo. Luego remoja tus pies durante unos 10 minutos. Pasado este tiempo, puedes utilizar un exfoliante para ayudar a eliminar la capa superficial de callos.

Enjuague sus pies y séquelos con una toalla limpia y seca. Este proceso se puede realizar hasta 2 veces por semana.

6. Solución de bicarbonato de sodio

La solución de bicarbonato de sodio ayuda a suavizar los callos de los pies, además de tener una acción exfoliante y antiséptica.

Ingredientes

Modo de preparación

Agrega los ingredientes a un bol y remoja los pies durante unos 10 a 15 minutos. Luego, aplica un exfoliante, enjuaga tus pies, sécalos bien y finaliza aplicando una crema hidratante.

7. Pasta de limón y ácido acetilsalicílico

La pasta de limón y ácido acetilsalicílico (Aspirina) tiene una acción exfoliante, que ayuda a eliminar la piel muerta, eliminando los callos en los pies.

Ingredientes

  • 5 o 6 comprimidos de ácido acetilsalicílico;
  • 1 cucharadita de agua;
  • 1 cucharadita de jugo de limón.

Modo de preparación

En un recipiente limpio y seco, muele las tabletas de ácido acetilsalicílico hasta formar un polvo. Luego agrega el agua y el jugo de limón, mezclando bien hasta formar una pasta. Aplicar esta mezcla sólo en los callos. Para mejorar el efecto y la penetración en la piel, cubrir el callo con plástico y, encima, una toalla tibia.

Déjalo actuar unos 10 minutos y luego utiliza un exfoliante o frota suavemente el callo con una piedra pómez para eliminar la piel muerta. Enjuague con abundante agua y jabón y luego seque su piel.

Debes tener mucho cuidado al utilizar esta pasta durante el verano o al usar sandalias o chanclas, ya que el limón puede provocar quemaduras en la piel. Aquí se explica cómo prevenir las quemaduras por limón.

8. Aceite de ricino

El aceite de ricino ayuda a aumentar la hidratación, nutrir la piel y aumentar su suavidad, por lo que es una buena opción como remedio casero para los callos. Vea otros beneficios del aceite de ricino.

Ingredientes

  • 1 cucharadita de aceite de ricino;
  • 100 mL de crema hidratante diaria o 1 cucharadita de otro aceite vegetal, como aceite de coco, aguacate o almendras.

Modo de preparación

En un recipiente limpio y seco mezcla los ingredientes y aplica sobre las callosidades, masajeando ligeramente hasta su total absorción.

Antes de utilizar aceite de ricino se debe realizar una prueba de alergia, preparando una mezcla que contenga 1 gota de aceite esencial de menta en 1 cucharadita de aceite portador y aplicándola en el dorso de la mano o en la curva del codo.

Espera 24 horas y, si durante este periodo la piel se enrojece o irrita, no se recomienda utilizar aceite de ricino para las callosidades.