6 jarabes caseros para la tos para las flemas

Tratamientos naturales

Los jarabes caseros con miel, berros o cebolla son excelentes para tratar la tos con flema, ya que tienen propiedades expectorantes que ayudan a eliminar las secreciones presentes en las vías respiratorias, resolviendo la tos en pocos días.

Sin embargo, si además de la tos existen otros síntomas, como fiebre, malestar general, flema verde o dificultad para respirar, por ejemplo, puede ser indicativo de bronquitis aguda o neumonía, y es importante consultar a un médico para que el Se puede indicar el mejor tratamiento.

Estos jarabes no reemplazan el tratamiento recomendado por tu médico para combatir las infecciones respiratorias, siendo importante seguir las indicaciones de tu médico. Además, los jarabes que contienen miel no deben ser utilizados por personas alérgicas a la miel, al propóleo o al polen, ni a niños menores de 1 año.

6 jarabes caseros para la tos para las flemas

Algunas opciones de jarabes caseros para la tos y las flemas son:

1. Sirope de berros con miel

El berro es una hoja que tiene propiedades expectorantes y descongestionantes, además de poder estimular el sistema inmunológico, por lo que es útil para tratar la tos.

Ientrando

  • Mel;
  • 1 manojo de berros;
  • Jugo de 1 limón.

Modo de preparación

Pasa 1 manojo de berros frescos en una licuadora y luego agrega 1 cucharada de miel y el jugo de 1 limón. Luego, lleva la mezcla a fuego lento hasta que espese y adquiera una consistencia pastosa. Se recomienda tomar 1 cucharada de este jarabe de 3 a 4 veces al día.

2. Sirope de hinojo

El jarabe de hinojo casero también es muy eficaz para combatir la tos, ya que esta planta tiene propiedades expectorantes.

Ingredientes

  • 500 ml de agua;
  • 1 cucharada de semilla de hinojo;
  • 1 cucharada de raíz de regaliz seca;
  • 1 cucharada de tomillo seco;
  • 250 ml de correo.

Modo de preparación

Coloca en una cacerola el agua, el hinojo y el regaliz y déjalo hervir durante 15 minutos. Luego, retira esta infusión del fuego, añade el tomillo y déjala reposar tapada hasta que se enfríe. Luego cuela, agrega la miel y calienta a fuego lento, revolviendo constantemente hasta que la mezcla quede homogénea.

Se puede tomar siempre que sea necesario y se puede conservar en el frigorífico durante un periodo máximo de 3 meses, en un frasco de vidrio bien tapado.

3. Sirope de cebolla

El sirope de cebolla es un excelente remedio casero para aliviar la tos porque tiene propiedades dilatadoras y expectorantes, facilitando la liberación de las secreciones acumuladas.

Ingredientes

  • 3 cebollas;
  • 500 ml de miel;
  • Jugo de 3 limones.

Modo de preparación

Mezcla todos los ingredientes en una licuadora hasta que adquiera una consistencia homogénea. Guarda el almíbar en el frigorífico en un recipiente de cristal. Consulte otras recetas de jarabe para la tos con cebolla.

Se recomienda que los niños mayores de 1 año tomen 2 cucharaditas del jarabe durante el día, mientras que para los adultos se recomiendan 4 cucharaditas al día. Este jarabe no está recomendado para niños menores de 1 año debido a la presencia de miel, que está contraindicada a esta edad.

4. Sirope de rábano, cebolla y miel

Este jarabe es otra buena opción para tratar la tos con flemas, ya que es rico en vitamina C, además de tener propiedades antioxidantes, ayudando a combatir las infecciones respiratorias.

Ingredientes

  • 3 rábanos;
  • 1 cabeza de ajo;
  • 1 cebolla morada;
  • 500 mL de correo.

Modo de preparación

Corta todos los ingredientes, mezcla y coloca en un recipiente lo suficientemente grande como para cubrirlo por completo. Dejar reposar 1 día. Colar y guardar en un recipiente de vidrio bien tapado y alejado del sol, que se puede conservar hasta por 3 meses. Se recomienda tomar 2 cucharadas de este jarabe al día.

5. Guaco y sirope de malva

El jarabe de guaco y malva también ayuda a aliviar la tos con flemas, ya que hace que la flema sea más líquida, facilitando su eliminación.

Además, este jarabe tiene un efecto calmante sobre los bronquios, reduciendo la producción de flemas.

Ingredientes

  • 1 cucharadita de flores u hojas secas de malva;
  • 1 cucharada de hojas frescas de guaco;
  • 1 taza de agua hirviendo;
  • 1 cucharada de miel.

Modo de preparación

Coloca la malva y el guaco en la taza con agua hirviendo. Tapar durante unos 10 minutos y añadir la miel. Se recomienda que los adultos tomen 1 taza de almíbar, hasta 3 veces al día. Ver también otras recetas con guaco para aliviar la tos.

El jarabe de guaco y malva no debe ser utilizado por niños, mujeres embarazadas o en período de lactancia, ni por personas con cáncer, tuberculosis, diabetes y enfermedades hepáticas, o que tomen medicamentos anticoagulantes.

6. Sirope de remolacha con miel

El jarabe de remolacha con miel ayuda a aliviar la tos con flemas provocada por resfriados o gripe, ya que tiene propiedades antiinflamatorias y expectorantes naturales.

Además, la miel también ayuda a lubricar la garganta y reducir la inflamación, aliviando la tos.

Ingredientes

  • 1 remolacha cruda;
  • 2 cucharadas de miel.

Modo de preparación

Lavar y cortar la remolacha en rodajas finas y colocar en un recipiente de vidrio limpio y seco. Agrega la miel, mezcla y deja reposar por 24 horas. Pasado este tiempo, recoge la parte líquida que se formó, que es el almíbar, y pásalo a otro recipiente de vidrio esterilizado y tápalo.

Puedes tomar 1 cucharada 3 veces al día hasta que desaparezcan los síntomas. Los niños mayores de 1 año pueden tomar 1 cucharadita de sirope de remolacha hasta 3 veces al día.

Lea también: Cómo dejar de toser: 13 consejos sencillos (¡e infalibles!)

Consejos para combatir la tos

Otros consejos útiles para combatir la tos son evitar las corrientes de aire y mantener la garganta hidratada tomando pequeños sorbos de agua varias veces al día.

Inhalar con 1 litro de agua hirviendo y 1 gota de aceite esencial de mejorana, tomillo o jengibre también ayuda a descongestionar la nariz.

Estas últimas plantas medicinales también se pueden utilizar de la misma forma para baños de inmersión, y también se recomiendan para niños y bebés.