5 causas principales (y qué hacer)

Primeros auxilios

Las lesiones oculares pueden ser causadas por los dedos, las uñas o el polvo, y también pueden ser consecuencia de golpes, quemaduras y contacto directo con productos químicos, como productos de limpieza, por ejemplo.

Una lesión en el ojo suele provocar enrojecimiento y malestar en el ojo, sin embargo, en casos más graves, también puede haber dolor, salida de lágrimas y dificultad para ver.

Debido al riesgo de infección e incluso pérdida de visión, después de una lesión ocular es importante acudir lo antes posible a un oftalmólogo o acudir a urgencias. En estos casos puede ser necesario el uso de colirios, antibióticos o incluso cirugía.

Causas principales

Las principales causas de llagas y hematomas en los ojos son:

1. Rasguño corneal (polvo o uñas)

Un rasguño en la córnea, también llamado abrasión corneal, está relacionado con traumatismos provocados por el polvo, frotarse los ojos con demasiada intensidad, las uñas, dormir con lentes de contacto o cuerpos extraños como motas o suciedad.

Estos traumatismos pueden provocar sensación de arena en el ojo, además de dolor, enrojecimiento, lágrimas e incluso dificultad para ver.

Qué hacer: Lavarse el ojo con agua corriente puede ayudar a aliviar las molestias y el rasguño suele curarse en unos 2 o 3 días sin que sea necesaria ninguna medida específica. Sin embargo, debido al riesgo de infección se recomienda consultar a un oftalmólogo lo antes posible para una evaluación, ya que pueden ser necesarios antibióticos.

Además, cuando el rasguño esté relacionado con cuerpos extraños, se debe evitar frotar o rascarse el ojo o intentar retirar el cuerpo extraño con las uñas, un bastoncillo de algodón o unas pinzas. En este caso, también es importante consultar a un oftalmólogo para que la extracción se realice con los cuidados adecuados. Vea más consejos sobre cómo cuidar un rasguño en la córnea.

2. Pinchazos, cortes y golpes en los ojos

Las lesiones en los ojos provocadas por objetos punzantes o punzantes como lápices, pinzas, utensilios de cocina y golpes pueden dañar el globo ocular y provocar síntomas como hinchazón, sangrado, dolor, enrojecimiento, exceso de lágrimas y dificultad para ver. Además, si el objeto está sucio o contaminado por microorganismos puede provocar una infección grave.

Qué hacer: Es importante acudir a urgencias lo antes posible para que se pueda iniciar el tratamiento más adecuado, que puede implicar el uso de antibióticos y, en los casos más graves, cirugía. Además, el objeto que causa la lesión no debe retirarse del ojo hasta que sea evaluado por un oftalmólogo, incluso si es visible. También se recomienda evitar toser o aplicar presión en el ojo para evitar empeorar la lesión.

3. Lesiones dentro del ojo

Las lesiones en el interior del ojo pueden resultar de golpes o accidentes y provocar sangrado que se puede notar por la presencia de sangre en el interior del ojo. Generalmente, además de dolor y enrojecimiento en el ojo, también puede haber dificultad para ver.

Qué hacer: En caso de sospecha de lesiones en el interior del ojo, es importante acudir a urgencias lo antes posible para una evaluación e inicio del tratamiento más adecuado.

4. Quemaduras por calor o chispas al soldar

Las lesiones provocadas por quemaduras por calor o chispas de soldadura pueden provocar síntomas como sensibilidad a la luz, dolor, enrojecimiento y lagrimeo. Además, cuando son provocados por chispas de soldadura, los síntomas pueden tardar hasta 12 horas en aparecer.

Qué hacer: En caso de quemadura por calor, se recomienda lavar el ojo y los párpados con agua corriente fría y colocar un paño húmedo sobre el ojo periódicamente hasta buscar atención médica. Además, se deben evitar los vendajes porque pueden empeorar las heridas y úlceras corneales. En todos los casos de quemaduras, es importante acudir a urgencias lo antes posible para una evaluación.

5. Quemaduras químicas

Las quemaduras químicas pueden deberse al uso de sustancias como ácidos y gases en el trabajo, explosiones de baterías de automóviles y productos de limpieza, por ejemplo.

Estas lesiones pueden provocar síntomas como dolor, enrojecimiento, aumento de la sensibilidad a la luz y dificultad para ver.

Qué hacer: Debido al riesgo de pérdida permanente de la visión, es importante buscar atención de emergencia lo antes posible para poder iniciar el tratamiento más adecuado. El tratamiento suele consistir en lavar los ojos afectados con suero o agua corriente para neutralizar la irritación provocada por la sustancia. Además, puede ser necesario un tratamiento con medicamentos como antibióticos y colirios lubricantes.

Consecuencias de las lesiones oculares.

Cuando no se tratan adecuadamente, las llagas en los ojos pueden causar:

  • Pérdida permanente de la visión;
  • Infecciones;
  • Úlcera corneal.

Debido a los riesgos que conlleva, es importante consultar a un oftalmólogo lo antes posible y, especialmente en casos de lesiones, cuerpos extraños y quemaduras, acudir a urgencias para iniciar lo antes posible el tratamiento más adecuado.