La sensación de desmayo puede ser causada por emociones fuertes, ataques de pánico, cambios bruscos de posición corporal, exposición prolongada al calor, anemia, hipoglucemia, infarto o derrame cerebral, por ejemplo.
Normalmente, la sensación de desmayo, conocida científicamente como lipotimia, se acompaña de otros síntomas como mareos, palidez o sudor frío, y desaparece a los pocos minutos, sin provocar pérdida del conocimiento. Consulta todos los síntomas de la lipotimia.
Sin embargo, cuando la sensación de desmayo no desaparece, es frecuente o provoca desmayos, se debe acudir inmediatamente a urgencias para que se identifique la causa y así comenzar el tratamiento más adecuado.
12 causas de sentirse débil
Las principales causas de sensación de desmayo son:
1. Emociones fuertes
Las emociones fuertes como el estrés, el miedo, el dolor o la ansiedad pueden provocar una sensación de desmayo.
Esto se debe a que en estas situaciones puede ocurrir un reflejo involuntario en el cuerpo que estimula el nervio vago, lo que resulta en una caída de la presión arterial y del ritmo cardíaco, lo que reduce brevemente el flujo sanguíneo al cerebro.
Qué hacer: Es importante buscar formas de relajarse para reducir el estrés y la ansiedad. Además, someterse a psicoterapia puede resultar útil para aprender a afrontar las emociones.
¡No ignores tus síntomas!
2. Ataque de pánico
Un ataque de pánico es una manifestación del síndrome de pánico o trastornos de ansiedad, que pueden provocar síntomas físicos y emocionales intensos.
Los principales síntomas de un ataque de pánico son sensación de miedo, dificultad para respirar, opresión en el pecho, palpitaciones, temblores, sudoración intensa, sensación de desmayo y ansiedad.
Estos síntomas suelen ser recurrentes, aparecen repentinamente, aumentan de intensidad a los pocos minutos y mejoran al cabo de 5 a 20 minutos.
Qué hacer: dirígete a un lugar seguro, inhala profundamente por la nariz y exhala lentamente por la boca y trata de mantener la calma, recordando que el episodio de pánico pasará en unos minutos. Esto es lo que debe hacer durante un ataque de pánico.
Además, se debe consultar a un psicólogo y, si es necesario, tomar antidepresivos o ansiolíticos recetados por el psiquiatra.
3. Cambios bruscos de posición
Los cambios repentinos de posición, como levantarse rápidamente después de estar sentado o acostado, pueden provocar una disminución rápida de la presión arterial y hacer que se sienta débil.
Este rápido descenso de la presión arterial, también conocido como hipotensión ortostática, puede ir acompañado de otros síntomas como oscurecimiento de la visión, confusión mental o mareos, por ejemplo. Saber identificar los síntomas de la hipotensión ortostática.
Qué hacer: Se recomienda levantarse lentamente desde una posición sentada o acostada para evitar una caída brusca de la presión arterial, especialmente en personas mayores, ya que esto puede aumentar el riesgo de caídas y fracturas óseas.
4. De pie por mucho tiempo
Estar de pie durante mucho tiempo puede provocar que la sangre se acumule en las piernas y dificultar que las pantorrillas bombeen sangre desde las piernas hasta el corazón, y también puede reducir el flujo sanguíneo al cerebro y hacer que se sienta débil.
Además, estar de pie durante mucho tiempo también puede provocar hinchazón en las piernas, los pies o los tobillos.
Qué hacer: debes evitar estar de pie durante muchas horas. Si esto no es posible, es importante flexionar las rodillas y los tobillos cada hora o ponerse de puntillas para ayudar a las pantorrillas a bombear sangre desde las piernas hasta el corazón, lo que reduce el riesgo de desmayarse.
5. Hipoglucemia
La hipoglucemia es la reducción brusca de la glucosa en sangre, que produce síntomas como mareos, temblores, sudor frío, palidez de la piel, palpitaciones del corazón, confusión mental o sensación de desmayo, por ejemplo. Sepa identificar todos los síntomas de la hipoglucemia.
La hipoglucemia generalmente ocurre cuando hay cierta desregulación del tratamiento en personas con diabetes que usan insulina u otros antidiabéticos, pero también puede surgir por pasar mucho tiempo sin comer, consumir bebidas alcohólicas o practicar ejercicio físico intenso.
Qué hacer: comer en pequeñas cantidades a intervalos de menos de 2 a 3 horas puede ayudar a prevenir la hipoglucemia. Sin embargo, si aparecen síntomas, se debe beber zumo de naranja natural o comer dulces o chocolates, por ejemplo, para aumentar rápidamente la glucosa en sangre.
Además, las personas en tratamiento por diabetes deben tener seguimientos periódicos con un endocrinólogo para realizar pruebas que midan los niveles de glucosa en sangre y evaluar la dosis de medicación para la diabetes.
6. Exposición prolongada al calor
La exposición prolongada al calor puede provocar un aumento anormal de la temperatura corporal, conocido como hipertermia, y provocar sensación de desmayo y mareos. Entiende mejor qué es la hipertermia.
Además de la sensación de desmayo, otros síntomas que pueden aparecer son sudoración excesiva, mareos, náuseas, confusión mental o incluso convulsiones.
Esta exposición prolongada al calor puede ocurrir por estar en lugares con altas temperaturas, realizar esfuerzos físicos, trabajar o usar exceso de ropa en climas muy cálidos y húmedos, por ejemplo. Ver otras causas de hipertermia.
Qué hacer: se debe acudir a una sombra o zona más fresca, beber abundante agua fría, bebidas con electrolitos o suero casero, para mantener el cuerpo hidratado y retirar el exceso de ropa, ropa ajustada o pesada. Si los síntomas no mejoran, se debe acudir inmediatamente a urgencias para someterse a un tratamiento que consiste en aplicar suero en una vena y enfriar el cuerpo.
7. Ataque al corazón
Un infarto es la interrupción brusca del flujo sanguíneo al corazón, lo que provoca la muerte de las células cardíacas en la región afectada, provocando síntomas como dolor en el pecho que puede irradiarse al cuello, mandíbula, axila, espalda, brazo, hombro izquierdo o incluso, para el hombro y brazo derechos.
Este dolor en el pecho, hombro y brazo puede ir acompañado de otros síntomas, como mareos, malestar general, náuseas, sudor frío, palidez, sensación de desmayo o síncope. Vea todos los síntomas de un ataque cardíaco.
Qué hacer: Debes buscar ayuda médica de inmediato o la sala de emergencias más cercana si aparecen síntomas de infarto, ya que es una condición grave que puede poner en riesgo tu vida.
De esta forma, es posible iniciar el tratamiento de inmediato, con medicación, cateterismo o angioplastia para regular el flujo de sangre al corazón y evitar complicaciones. Descubra cómo se trata el ataque cardíaco.
8. Arritmia cardíaca
La arritmia cardíaca es un cambio en el ritmo normal de los latidos del corazón, que puede latir más rápido o más lento, y provocar síntomas como mareos, sensación de desmayo, debilidad, dolor en el pecho, dificultad para respirar o malestar general.
La arritmia cardíaca puede ser causada por un ataque cardíaco, presión arterial alta, diabetes, problemas de las válvulas cardíacas o de la tiroides, apnea del sueño o incluso el uso de medicamentos.
Qué hacer: Se debe buscar ayuda médica lo antes posible o acudir al servicio de urgencias más cercano, para que se pueda diagnosticar el tipo de arritmia y su causa, e iniciar el tratamiento más adecuado. Vea cómo se trata la arritmia.
9. AVC
Los accidentes cerebrovasculares u otras enfermedades neurológicas, como la enfermedad de Parkinson, los tumores cerebrales o el Alzheimer, por ejemplo, pueden provocar mareos, pérdida del equilibrio y sensación de desmayo.
Otros síntomas del derrame cerebral son, por ejemplo, falta de fuerza en un lado del cuerpo, dificultad para hablar o hablar con dificultad, boca torcida y cejas caídas. Sepa cómo identificar los síntomas de un accidente cerebrovascular.
Qué hacer: Si sospecha de un derrame cerebral, debe acudir inmediatamente a la sala de emergencias más cercana, ya que es una emergencia médica que requiere tratamiento inmediato. Para otras enfermedades neurológicas, el tratamiento debe ser realizado por un neurólogo que pueda recomendar remedios específicos para la enfermedad a tratar.
10. Anemia por deficiencia de hierro
La anemia por deficiencia de hierro es causada por la deficiencia de hierro, que es importante para producir hemoglobina y formar glóbulos rojos, que son células que transportan oxígeno a los tejidos del cuerpo.
Así, la reducción de oxígeno, especialmente en el cerebro, puede provocar sensación de desmayo, mareos, somnolencia, cansancio excesivo, palidez o dificultad para respirar, por ejemplo.
Qué hacer: El tratamiento de la anemia por deficiencia de hierro debe realizarse según la orientación del hematólogo y normalmente incluye el uso de suplementos de hierro, además del consumo de alimentos ricos en hierro como lentejas, perejil, frijoles y carnes rojas, por ejemplo. Vea cómo hacer una dieta rica en hierro.
11. Laberintitis
La laberintitis es una inflamación del laberinto del oído, responsable de la audición y el equilibrio, y puede provocar mareos, vértigo, pérdida de equilibrio, pérdida de audición, náuseas o sensación de desmayo. Consulte otros síntomas de laberintitis.
La laberintitis es más común en personas mayores, pero puede ocurrir a cualquier edad, y estar causada por infecciones respiratorias, diabetes, hipertensión arterial o incluso factores emocionales como el estrés, la ansiedad o la depresión, por ejemplo.
Qué hacer: Debes consultar a un otorrinolaringólogo para comenzar el tratamiento adecuado, que puede incluir medicamentos antivértigo y/o antieméticos para ayudar a aliviar los síntomas, o antibióticos si tienes infecciones bacterianas. Además, se recomienda evitar el estrés y el consumo de cafeína, azúcar y cigarrillos, situaciones que pueden empeorar la crisis de mareos. Vea cómo se trata la laberintitis.
12. Efectos secundarios de algunos medicamentos
Algunos medicamentos, como los antihipertensivos o los diuréticos, pueden provocar una caída brusca de la presión arterial como efecto secundario y provocar una sensación de desmayo.
Generalmente, este efecto secundario está relacionado con dosis muy altas de estos medicamentos.
Qué hacer: se debe consultar al médico responsable del tratamiento, para que pueda evaluar el efecto secundario del medicamento y, si es necesario, el médico pueda modificar la dosis o cambiar el medicamento. En ningún caso debe interrumpir el tratamiento ni cambiar dosis por su cuenta.
Cómo evitar desmayarse
Para evitar desmayarse, cuando tenga ganas de desmayarse, inmediatamente debe acostarse con las piernas elevadas por encima de la altura del corazón, para facilitar el flujo sanguíneo al cerebro.
Si no es posible acostarse, conviene sentarse, bajar el torso hacia adelante y colocar la cabeza entre las rodillas.
Es importante permanecer en una de estas posiciones hasta que pase la sensación de desmayo.
Cuando ir al medico
La sensación de desmayo suele aparecer de forma repentina y mejora a los pocos minutos, de forma espontánea.
Sin embargo, es importante acudir inmediatamente a urgencias en las siguientes situaciones:
- Sensación de desmayo que no desaparece, es frecuente o provoca desmayo;
- Dolor en el pecho que puede irradiarse al brazo, cuello, mandíbula o espalda;
- Náuseas o vómitos;
- Falta o pérdida de equilibrio;
- Falta de fuerza en un lado del cuerpo o dificultad para hablar;
- Sudor frío, palidez, temblor o debilidad;
- Palpitaciones del corazón o dificultad para respirar;
- Somnolencia o confusión mental.
Además, para las personas que tienen antecedentes de enfermedades, como diabetes, epilepsia o problemas cardíacos, siempre es importante acudir al hospital cuando se sienten desmayados.
En todos los casos, el médico realiza una valoración de los síntomas y del historial de salud, además de solicitar pruebas para que se pueda diagnosticar la causa de la sensación de desmayo y así indicar el tratamiento más adecuado.
