10 causas principales (y qué hacer)

Asma

El jadeo puede ocurrir debido a una actividad física más intensa, considerándose normal, pero también puede ocurrir debido al sedentarismo, que es la falta de actividad física, lo que resulta en cansancio excesivo y dificultad para realizar las actividades diarias.

Además, las sibilancias, también conocidas como hiperventilación, pueden surgir debido a condiciones de salud como ansiedad, bronquitis asmática, neumonía, anemia o COVID-19, por ejemplo, y ir acompañadas de otros síntomas como debilidad, mareos, falta de aliento, tos. o dolor en el pecho, por ejemplo.

Es importante consultar a un neumólogo o médico de cabecera siempre que aparezcan sibilancias, especialmente cuando se vuelven frecuentes y no mejoran ni siquiera con el reposo, o se acompañan de otros síntomas, para poder diagnosticar la causa e iniciar el tratamiento más adecuado.

Las principales causas de las sibilancias son:

1. Actividad física intensa

Al realizar una actividad física muy intensa a la que el cuerpo no está acostumbrado, es común que la respiración se acelere y se acorte, esto es señal de que el cuerpo está percibiendo la actividad y está generando acondicionamiento físico.

Qué hacer: después de una actividad física intensa, se recomienda descansar, ya que esto hará que la respiración vuelva gradualmente a la normalidad. Además, es importante seguir practicando la actividad, ya que así la persona gana en acondicionamiento físico y no experimenta sibilancias y fatiga con tanta facilidad.

¡No ignores tus síntomas!

2. Ansiedad

La ansiedad puede provocar la aparición de síntomas psicológicos y físicos, como jadeos, mareos, dolor en el pecho y, en algunos casos, sensación de desmayo, por ejemplo. Saber reconocer los síntomas de la ansiedad.

Qué hacer: Es importante reconocer los factores que propician la aparición de síntomas de ansiedad, además de adoptar medidas que ayuden a relajarse, como practicar actividad física, valorar el presente e intentar respirar profunda y tranquilamente. De esta forma es posible controlar los síntomas de ansiedad.

Sin embargo, cuando estas actitudes no son suficientes o cuando los síntomas de ansiedad pueden interferir en las actividades del día a día, se recomienda buscar ayuda de un psicólogo para que se pueda iniciar un tratamiento más específico que promueva el bienestar de la persona.

3. Anemia

Una de las características de la anemia es la disminución de la concentración de hemoglobina, que es la encargada de transportar oxígeno al organismo. Así, cuando hay poca hemoglobina disponible, la persona puede respirar más pesadamente en un intento de captar más oxígeno y así cubrir las necesidades del organismo.

Conozca otros síntomas de la anemia.

Qué hacer: en estos casos, es importante realizar pruebas para confirmar la anemia e iniciar un tratamiento según recomendación del médico, que puede implicar el uso de medicamentos, suplementos o cambios en la dieta, por ejemplo.

4. Insuficiencia cardíaca

En la insuficiencia cardíaca, el corazón tiene dificultad para bombear sangre al cuerpo, lo que produce una disminución en la cantidad de oxígeno que llega a los pulmones, lo que provoca síntomas como sibilancias, cansancio, tos nocturna e hinchazón de las piernas al final del día. , Por ejemplo. Comprenda más sobre la insuficiencia cardíaca.

Qué hacer: se recomienda identificar la insuficiencia cardíaca mediante exámenes y, si se confirma, iniciar el tratamiento de acuerdo con las indicaciones del cardiólogo. El médico suele recomendar el uso de medicamentos para mejorar la función cardíaca, además de cambios en los hábitos alimentarios y de estilo de vida.

5. Asma

El principal síntoma del asma es la dificultad para respirar debido a la inflamación de los bronquios, lo que impide el paso del aire, haciendo que la respiración sea más dificultosa. Los síntomas de los ataques asmáticos suelen aparecer cuando la persona se expone al frío, alérgenos, humo o ácaros del polvo, siendo más común a primera hora de la mañana o cuando la persona se va a dormir.

Qué hacer: Es importante que la persona tenga siempre a mano el inhalador para los ataques de asma, en cuanto aparezcan los primeros síntomas se debe utilizar el medicamento. Si el petardo no está cerca, se recomienda mantener la calma y permanecer en la misma posición hasta que llegue la ayuda médica o lo lleven a un servicio de urgencias. Además, se recomienda aflojarse la ropa y tratar de respirar lentamente. Consulta primeros auxilios en caso de asma.

6. Neumonía

La neumonía es una enfermedad respiratoria causada por virus, bacterias u hongos y que, entre otros síntomas, puede provocar sensación de dificultad para respirar y sibilancias. Esto se debe a que en la neumonía, los agentes infecciosos provocan inflamación pulmonar y acumulación de líquido dentro de los alvéolos pulmonares, lo que dificulta el paso del aire.

Qué hacer: El tratamiento de la neumonía debe realizarse según la causa y según la orientación del neumólogo o médico de cabecera, pudiendo recomendarse el uso de antibióticos, antivirales o antifúngicos, además de cambiar la dieta para que el sistema inmunológico se fortalezca. . Comprenda cómo se trata la neumonía.

7. EPOC

La EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva crónica) es una inflamación u obstrucción crónica en el revestimiento de los bronquios o bronquiolos, dificultando el intercambio de gases respiratorios, generalmente causada por bronquitis crónica o enfisema pulmonar, provocando síntomas como sibilancias, dificultad para respirar, constante. tos con flema o sensación de ruido o sibilancias en el pecho al respirar.

La EPOC puede surgir principalmente por el hábito de fumar, ya que el humo y otras sustancias presentes en los cigarrillos provocan gradualmente la destrucción del tejido que forma las vías respiratorias.

Qué hacer: El tratamiento de la EPOC debe incluir medicación, como broncodilatadores inhalados, corticoides o antibióticos orales, fisioterapia respiratoria o, en los casos más graves, cirugía. Además, es fundamental dejar de fumar. Vea cómo se trata la EPOC.

8. Bronquitis asmática

La bronquitis asmática es una inflamación de los bronquios pulmonares que surge debido a una alergia o infección respiratoria y que provoca síntomas como sibilancias, dificultad para respirar y sibilancias al respirar, por ejemplo.

Qué hacer: El tratamiento de la bronquitis asmática debe estar guiado por un neumólogo que podrá recomendar el uso de medicamentos que desinflaman los bronquios pulmonares y facilitan el paso del aire, como bombas de inhalación, antibióticos o fisioterapia respiratoria. Consulta los principales tratamientos para la bronquitis asmática.

9. COVID-19

El COVID-19 es una infección respiratoria en la que los primeros síntomas que pueden aparecer son dolor de garganta, tos seca, fiebre o cansancio excesivo.

Además, el COVID-19 puede provocar otros síntomas como dolor corporal, dolor de cabeza, pérdida del gusto o del olfato, secreción o congestión nasal, por ejemplo. En casos más graves, también pueden producirse sibilancias, dificultad para respirar o dificultad para respirar. Sepa cómo identificar todos los síntomas del COVID-19.

Qué hacer: Es importante realizar el aislamiento, y la prueba rápida de COVID, que puede o la prueba RT-PCR recomendada por el médico general, para confirmar la infección, y si es necesario, el médico puede prescribir el uso de medicamentos que ayuden a aliviar los síntomas. . Comprenda cómo se trata el COVID-19.

10. Estilo de vida sedentario

El sedentarismo es un estilo de vida en el que no se practica habitualmente ningún tipo de ejercicio físico, además de permanecer mucho tiempo sentado, lo que influye directamente en la salud y el bienestar, traduciéndose en aumento de peso, obesidad, cansancio constante, además de sibilancias y dificultad para respirar al realizar actividades sencillas del día a día.

Qué hacer: Para salir del sedentarismo es necesario cambiar algunos hábitos de vida, tanto relacionados con la alimentación como con el ejercicio físico, y se recomienda consultar a un médico de cabecera para valorar su estado de salud general y comenzar a practicar ejercicio físico de forma paulatina, acompañado de un profesional de educación física. Descubra cómo salir del sedentarismo.