La osteoartritis de rodilla es una afección caracterizada por el desgaste de la articulación, lo que provoca una inflamación local, lo que provoca síntomas como dolor, enrojecimiento, hinchazón y dificultad para mover la rodilla. Con el tiempo, es natural que la artrosis empeore y, por tanto, pueden empezar a aparecer síntomas más graves, como deformidades articulares y dolores intensos, que pueden hacer que la persona tenga dificultad para caminar y mayor tendencia a cojear.
Esta situación es más común en personas mayores, debido al desgaste natural de las articulaciones, sin embargo también puede ser consecuencia de fuertes golpes en la rodilla o enfermedades inflamatorias, por ejemplo.
Es importante que luego de identificar los síntomas de la artrosis se consulte al ortopedista para que se realicen pruebas que confirmen el cambio y se inicie el tratamiento más adecuado, que puede implicar el uso de medicamentos, fisioterapia y, en los casos más graves. casos, cirugía.
Síntomas de artrosis de rodilla
Los síntomas de la artrosis de rodilla surgen debido al desgaste de la articulación de la rodilla, siendo los principales:
- Dolor de rodilla después del esfuerzo, que puede mejorar con el descanso;
- Rigidez al levantarse de la cama por la mañana. o tras largos periodos de descanso que mejora a los 30 minutos;
- Presencia de ruidos crepitantes al moverse. o “crujir”
- Hinchazón y calor, generalmente en la fase inflamatoria
- Sensación de aumento del tamaño de la rodilla. debido al crecimiento de los huesos alrededor de la rodilla
- Movimientos más limitadosespecialmente enderezar completamente la rodilla
- Dificultad para sostener la pierna. en el piso
- Músculos del muslo más débiles y más atrofiado.
Es común que ambas rodillas se vean afectadas, sin embargo los síntomas pueden ser diferentes entre ellas, ya que el grado de afectación de cada articulación puede variar.
Ante la presencia de síntomas posiblemente indicativos de artrosis de rodilla, es importante consultar al ortopedista para que pueda realizar el diagnóstico, identificar la posible causa e iniciar el tratamiento más adecuado.
Cómo confirmar el diagnóstico.
El diagnóstico de artrosis en rodilla lo realiza el ortopedista con base en la evaluación de los síntomas presentados y un examen físico de la articulación, en el cual se realizan movimientos con la rodilla con el objetivo de verificar la movilidad, la presencia de chasquidos y dolor, así como su intensidad, y también se realiza una valoración de los factores de riesgo de la artritis de rodilla, ya que es más común en personas mayores de 50 años.
Además, el médico podrá solicitar pruebas de imagen, como radiografías, tomografía computarizada, resonancia magnética y/o ecografía de la rodilla para valorar el grado de desgaste de la articulación y orientar el tratamiento más adecuado.
Causas principales
Las principales causas de la artrosis de rodilla pueden ser:
- Desgaste natural de la articulación, que se produce debido a la edad;
- Tener mucho sobrepeso;
- Traumatismo directo, como caer de rodillas, por ejemplo;
- Enfermedad inflamatoria asociada al mal uso de la articulación.
Este problema afecta principalmente a personas mayores de 45 años, pero si la persona tiene mucho sobrepeso o presenta alguno de estos factores de riesgo, por ejemplo, puede desarrollar artrosis a una edad temprana, alrededor de los 30 años.
Cómo se realiza el tratamiento.
El tratamiento de la artrosis de rodilla debe realizarse según la orientación del ortopedista, quien puede indicar el uso de medicamentos antiinflamatorios, analgésicos o suplementos nutricionales que ayuden a restaurar la articulación de la rodilla.
Los principales tratamientos para la artrosis de rodilla incluyen:
1. Medicamentos
Los medicamentos recomendados por el ortopedista para la artrosis de rodilla tienen como objetivo reducir el dolor y las molestias en la articulación.
Los principales medicamentos recomendados son:
- Paracetamol: es el tratamiento de primera elección indicado para reducir el dolor leve a moderado;
- Analgésicos opioidescomo el tramadol: está indicado para dolores intensos en casos más graves de artrosis de rodilla;
- Duloxetina: Se utiliza para ayudar a aliviar el dolor en casos de dolor crónico.
Además, existen otros medicamentos que pueden estar indicados para la artrosis de rodilla, como la inyección de ácido hialurónico en la articulación o el uso de suplementos orales de glucosamina y sulfato de condroitina. Sin embargo, aún se necesitan más estudios sobre su uso en la artrosis de rodilla. Consulte más opciones de medicamentos para la osteoartritis.
2. Ejercicios
Algunos ejercicios para la artrosis de rodilla incluyen el estiramiento de los músculos de las piernas, que puede realizar la propia persona o con la ayuda de un fisioterapeuta, o montar en bicicleta.
Sin embargo, lo ideal es que los ejercicios se realicen con la orientación de un fisioterapeuta, ya que cuando se realizan de forma incorrecta o con una articulación muy dolorosa, pueden empeorar los síntomas. Ver los principales ejercicios para la artrosis.
3. Fisioterapia
La fisioterapia para la artrosis de rodilla debe realizarse preferentemente todos los días, en los momentos de mayor dolor. El fisioterapeuta debe evaluar la articulación y aconsejar el mejor tratamiento, respetando las limitaciones de cada persona. En las sesiones de fisioterapia se pueden utilizar equipos específicos y ejercicios de estiramiento y fortalecimiento muscular. Descubra cómo se realiza la fisioterapia para la artrosis.
4. Cirugía
La cirugía está indicada en los casos en los que el uso de medicación y fisioterapia no han sido eficaces para aliviar los síntomas y el dolor persiste, incluso después de meses de tratamiento convencional.
La cirugía se puede realizar extirpando la articulación de la rodilla y colocando una prótesis en su lugar. Después de eso, normalmente es posible una recuperación completa. Sin embargo, es necesario someterse a sesiones de fisioterapia para acelerar la recuperación. Descubra cómo se hace y cuánto tiempo lleva la recuperación.
5. Tratamiento natural
Un buen tratamiento natural para la artrosis de rodilla es aplicar una cataplasma tibia de linaza en la articulación al final del día. Simplemente haz un pequeño manojo de tela limpia y fina con 3 cucharadas de semillas de lino y caliéntalo en el microondas durante 1 o 2 minutos, hasta que se caliente. Luego aplicar en las rodillas durante 10 a 15 minutos. Consulte algunas opciones de remedios caseros para la osteoartritis.